El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, fue operado hoy con éxito de una hernia umbilical en el hospital Hadasa Ein Karem de Jerusalén, tras sufrir la víspera fuertes dolores abdominales, informó su oficina.

 

La cirugía, que obligó a aplazar la reunión semanal del consejo de ministros, duró aproximadamente una hora y el tiempo de recuperación tomó alrededor de dos horas, precisó la oficina de Netanyahu en un comunicado divulgado por medios israelíes.

 

Aunque se esperaba inicialmente que la operación se realizaría con anestesia local, los médicos decidieron utilizar anestesia general, por lo que durante ese breve periodo el ministro de Defensa, Moshe Yaalon, ejerció como jefe de gobierno en funciones.

 

Netanyahu, quien será dado de alta este mismo domingo, se recuperará y descansará en casa por lo menos hasta el próximo jueves, según fuentes médicas, citadas por el diario Haretz.

 

“Quiero agradecer al equipo médico que me ha tratado y a todos los ciudadanos que se han interesado por mi salud. Seguiré preocupándome todo el tiempo por vuestra seguridad”, dijo Netanyahu en un comunicado difundido por su oficina.

 

Subrayó que ha recuperado la autoridad transferida durante la operación a su ministro de Defensa.

 

Netanyahu, de 63 años edad, ingresó la noche del sábado al hospital poco después de sentir molestias a la altura del ombligo, tras lo cual fue examinado por su médico personal el doctor Tzvika Berkovich y el cirujano Aryeh Durst.

 

Una tomografía computarizada determinó que tenía una hernia umbilical, por lo que los médicos decidieron operarlo inmediatamente.

 

Aunque la operación de Netanyahu obligó a aplazar la reunión dominical del gabinete, el debate en el seno del comité ministerial sobre la excarcelación de 103 presos palestinos tendrá lugar este día, como estaba planeado, bajo la dirección de Yaalon.

 

Esta comisión debe analizar la liberación de los primeros 26 de un total de 103 palestinos encarcelados en Israel desde antes de la firma de los Acuerdos de Oslo (1993) como gesto hacia los palestinos para reanudar el proceso de paz, que comenzará el próximo miércoles en Jerusalén.