Cerys Cooksammy-Parnell, de Northampton, tiene solo 11 años pero cuenta con un coeficiente intelectual superior al de Albert Einsten e incluso al del científico Stephen Hawking.

 

La menor se sometió a un examen en el que consiguió una puntuación de 162 en la escala Catell B, muy por encima de la de su padre, quien tiene un coeficiente intelectual de 142.

 

“Cuando sea mayor quizás tenga unas conversaciones más intelectuales, acordes a mi coeficiente intelecutal, pero hasta entonces me centraré en la moda, en divertirme y sacar buenas notas”, señala Cerys.

 

Dean, el padre de esta niña prodigio británica, ya forma parte del “Club Mensa” que agrupa a personas con un coeficiente de élite. La propia asociación en Reino Unido ha invitado a Cerys a unirse a los 21 mil miembros que componen la comunidad y de los que mil 300 son niños.