BEIRUT. 29 personas murieron en ataques de las tropas del gobierno sirio contra aldeas bajo control de los rebeldes en las áreas adyacentes a Idlib, en el norte de Siria.

 

Tras cobrar impulso en meses recientes en la guerra civil siria, las fuerzas del presidente Bashar Assad han tomado la ofensiva contra los rebeles en varios flancos, inclusive en la provincia Idlib en la frontera norte con Turquía. Las fuerzas del gobierno tienen firme control de la capital provincial del mismo nombre, mientras que docenas de brigadas rebeldes controlan las zonas rurales.

 

El Observatorio para los Derechos Humanos con sede en Gran Bretaña dijo que el gobierno atacó con cohetes, fuego de artillería e incursiones aéreas, durante la noche a cinco aldeas cercanas a la ciudad de Idlib; anunciaron también que ocho mujeres y seis niños figuraban entre los 29 muertos.

 

El grupo, que se basa en información procedente de una red de activistas dentro de Siria, dijo que el más reciente ataque mortífero tuvo lugar en la aldea de Maghra, donde un cohete cayó sobre una hilera de casas donde murieron 13 personas. Tres aldeas vecinas Bara, Basamis y Kafr Nabl, fueron blanco de proyectiles de artillería que mataron a otras 13 personas. Tres personas más murieron en un ataque aéreo en la aldea de Iblin, informó el Observatorio.

 

En el centro de Siria, un coche bomba hizo explosión frente a un cuartel policial en el pueblo de Deir Atiyeh, unos 80 kilómetros (50 millas) al norte de Damasco, y murieron 13 personas, entre ellas 10 policías. Uno niño estaba entre las víctimas, dijo el Observatorio.