Grupos criminales canadienses tienen lazos directos con miembros del crimen organizado en México para facilitar el abastecimiento de cocaína para incrementar sus ganancias eliminando a sus terceros.

 

Un análisis de la Gendarmería Real de Canadá (GRC). Revela también que al menos 10 canadienses han sido asesinados en México desde el 2008, en hechos presuntamente ligados al crimen organizado.

 

La investigación interna también señala que todos tenían importantes antecedentes criminales y que algunos de ellos eran conocidos como parte de redes de tráfico de drogas en Canadá.

 

Esta información la obtuvo la agencia canadiense Canadian Press a través de la Ley sobre el Acceso a la Información.

 

De acuerdo con la agencia, la GRC considera que las fronteras mundiales son cada vez más difíciles de controlar, debido a la proliferación de redes del crimen organizado.

 

Los grupos criminales canadienses se han expandido, estableciendo negocios a nivel internacional con organizaciones de diferentes países.

 

El asesinato en México de varios canadienses con conexiones criminales puede ser una señal de que la batalla entre grupos de delincuencia organizada canadienses y las acciones policiacas de ese país causaron que estas organizaciones vayan hacia el sur, lo que contradice la percepción popular que los cárteles de drogas están migrando hacia el norte, indica el reporte de la GRC.

 

“Grupos criminales canadienses están negociando directamente con los delincuentes y organizaciones criminales en México, un país que lucha contra la corrupción y la violencia brutal”, dice el documento.

 

En abril del 2012, Thomas Gisby, un hombre de la provincia de Columbia Británica conocido por sus vínculos con pandillas, fue asesinado frente a una cafetería de Nuevo Vallarta. Tres miembros de un grupo conocido como United Nations Gang y dos personas que supuesto vínculos con los Hells Angels también fueron asesinados en México.

 

En el mismo momento, las intercepciones de cargamentos de drogas con destino a Canadá “apuntan con las posibles conexiones entre las redes del crimen organizado mexicanas y canadienses”, afirma la policía montada.