El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, afirmó hoy que la organización no ha recibido la oferta de ningún país para albergar el Mundial de 2014 y que no hay “Plan B” para realizarlo fuera de Brasil por la ola de protestas que sacude al país.

 

Valcke hizo estas declaraciones en el estadio Maracaná, de Río de Janeiro, para acallar los rumores de que el Mundial de fútbol del próximo año se realizaría fuera de Brasil si continuaban las manifestaciones, que ocurren durante la celebración de la Copa Confederaciones.

 

“La final se celebrará el domingo en el Maracaná y el Mundial de fútbol en Brasil”, afirmó, además de negar que hubiesen recibido otras ofertas para organizar el evento en 2014.

 

“Brasil debe seguir realizando la Copa y cumplir las expectativas”, añadió el ministro de Deportes del país, Aldo Rebelo, también en el acto, en el que se presentó un informe con cifras del empleo y movimiento económico generados por la Copa Confederaciones.

 

Valcke explicó que la FIFA había visto “un gran trabajo” de Brasil con los seis estadios de la Confederaciones (en Brasilia, Río de Janeiro, Salvador, Belo Horizonte, Recife y Fortaleza) y que ahora había que “estar preparados” para llegar a tiempo para el Mundial.

 

En principio, los estadios de las otras seis ciudades que albergarán el Mundial junto a las anteriores (Sao Paulo, Manaos, Cuiabá, Natal, Curitiba y Porto Alegre) deben estar listos para diciembre de 2013.

 

Valcke afirmó que la FIFA ha invertido 70 millones de reales (más de 31 millones de dólares) en empresas brasileñas durante la Copa Confederaciones, para contratar servicios como seguridad privada o la comida de los voluntarios.