Una importante comisión de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, dominada por los republicanos, se prepara para emitir el martes sus primeros votos del año sobre una iniciativa de reforma migratoria, en particular sobre un reforzamiento de las medidas policiales que ha desatado fuertes protestas entre los demócratas y los defensores de los inmigrantes.

 

Mientras tanto, en el Senado, un legislador republicano está promoviendo una propuesta de seguridad fronteriza con la que confía ganar apoyo hacia una iniciativa de ley para una reforma amplia del sistema de inmigración en la cámara alta.

 

El proyecto policial en la cámara baja, propuesto por el representante Trey Gowdy, republicano por Carolina del Sur, facultaría a las autoridades estatales y locales para que hagan cumplir las leyes federales de inmigración, hacer que los fraudes con pasaportes y visas sean delitos graves que ameriten deportación, destinar mayores fondos a la construcción de más centros de detención, y reforzar las medidas en contra de aquellos inmigrantes sospechosos de representar más riesgos.