La construcción del Túnel Emisor Oriente presenta un retraso debido a deficiencias encontradas en el proyecto inicial, el cual se originó durante la administración pasada, señaló David Korenfeld, director de la Comisión Nacional del Agua.

 

“La falta de una proyecto ejecutivo y el conocimiento deficiente de las características geológicas del terreno, derivó en rendimientos inferiores a los contractuales”, recalcó el funcionario al poner en marcha los primeros 10 kilómetros del TEO.

 

De acuerdo con Korenfeld, de continuar los trabajos en el sistema al ritmo que se venía trabajando hasta noviembre, el primer tramo de la obra no hubiera quedado listo para operar en la presente temporada de lluvias.

 

Por ello, el gobierno actual tuvo que “redoblar esfuerzos” para avanzar en el proyecto hídrico, lo que significará un costo estimado de 32 mil millones de pesos para concluir la obra. Durante un recorrido realizado en marzo, Francisco Leal Flores, residente del tramo 1 del TEO, estimó que el costo ascendería a 20 mil millones de pesos, cuando Felipe Calderón, al anunciar la obra, dijo que costaría 14 mil millones de pesos.

 

Ante esta situación, el presidente Enrique Peña Nieto instruyó al titular de la Conagua a iniciar de inmediato la valoración técnica, financiera y de ingeniería necesarias para conocer con mayor precisión el costo real y el tiempo necesarios para la conclusión del TEO. Hace unos meses, autoridades de la Conagua dijeron que la obra se concluiría antes de que termine el sexenio.

 

De acuerdo con Ramón Aguirre, titular del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACM), “éste no es un proyecto sencillo” y deberá esperarse hasta tener los resultados del estudio que realizará la Conagua para determinar el lapso en el que concluirá la obra.

 

“Seguramente va a tardar, y es que después de cinco años apenas llevan 35% concluido, lo que nos hace pensar que demorará”, dijo a 24 HORAS el funcionario.

 

Aguirre, quien desde la administración de Ebrard es el encargado de la política hídrica de la capital del país, recordó que el plan del TEO surgió en el año 2000, como parte de un fideicomiso firmado entre los gobierno del DF, el Estado de México y la Conagua, pero fue Marcelo Ebrard quien “lo empujó como un proyecto necesario”.

 

Agregó que “la gran visión y ejecución de la obra” estuvo a cargo de la Conagua desde 2007, cuando la instancia era presidida por José Luis Luege.

 

Ese año, el gobierno de Calderón aprobó el Programa de Sustentabilidad Hídrica para el Valle de México -que incluía la construcción del TEO- en conjunto con el entonces gobernador del  Estado de México, Enrique Peña Nieto, y el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard.

 

Seis años después, el director de la Conagua precisó que al TEO se le tienen que adicionar obras que no estaban planeadas de origen, pero que son necesarias para darle mayor seguridad a su operación, como la rectificación del Río Tula, la estructura de descarga del Río El Salto y otras captaciones a lo largo y ancho del túnel.

 

El primer tramo del TEO, que equivale a 10 kilómetros, es el único que puede tener una operación funcional independiente al resto de la obra, ya que el resto de las secciones sólo podrán tener actividad hasta que se concluyan los 62 kilómetros del túnel.

 

Una vez que quede terminado, el túnel que se extiende desde la delegación Gustavo A. Madero, en el DF, hasta Atotonilco, en Hidalgo, tendrá la capacidad de desaguar 165 mil millones de litros de agua residual y pluvial.

 

Si bien el TEO se ha presentado como una solución para mitigar el riesgo de inundaciones en la zona metropolitana del Valle de México, el director de la SACM precisó que la infraestructura de la obra “tiene una capacidad limitada y las lluvias pueden rebasar esa capacidad”.

 

Por su parte, el gobernador del estado de México, Eruviel Avila Villegas, expresó su admiración por la construcción del túnel, y pidió a la ciudadanía evitar tirar basura en la vía pública, una de las causas de la obstrucción de drenaje, pues de hacerlo “de nada va a servir esta magna obra”.

 

En tanto, el jefe de Gobierno del DF señaló que la puesta en marcha de los primeros 10 kilómetros del Túnel Emisor Oriente, otorga tranquilidad respecto a una problemática de la Ciudad de México y que su administración aportará 7 mil millones de pesos.

 

Datos

 

32

millones de pesos se necesitarán para concluir la obra

El proyecto original fue firmado en la administración pasada entre Felipe Calderón Hinojosa, Marcelo Ebrard Casaubón y Enrique Peña Nieto