Con al menos 17 manifestantes detenidos concluyó la marcha conmemorativa de los 42 años del llamado Halconazo, la matanza ocurrida el 10 de junio de 1971.
Previamente se habló más de una veintena, pero autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) señalan que algunos serían liberados.
De acuerdo al reporte de las autoridades, los detenidos fueron llevados a la agencia 50 del Ministerio Publico, sin embargo, el número podría aumentar.
Del enfrentamiento, en el cual grupos de presuntos anarquistas se enfrentaron con piedras, palos contra los policías, no se reportan heridos ni personas detenidas por el incidente.
Integrantes del Comité 68, del movimiento #YoSoy132, la Coordinadora Estudiantil Politécnica, Coordinadora General de CCH’s y de otras instituciones de educación superior se desmarcaron de los actos de violencia y grupos anarquistas que calificaron de infiltrados en la Plaza de la Constitución.
En estos momentos, alrededor de 500 policas y granaderos se mantiene en la Plaza de la Constitución, y en las calles aledañas al primer cuadro de la ciudad. Al momento la vialidad del primer cuadro fue reabierta.
Jesús Robles Mallof, abogado de los detenidos en el #1D, denuncia que un joven fue detenido arbitrariamente mientras grababa la movilización.
A través de su cuenta de Twitter asegura “la detención arbitraria de @NickOps es un atentado contra el derecho a la información y a la libertad de expresión”.
El joven envió un último video desde la patrulla en la que denuncia su detención sólo pro grabar el acto. Aunque al momento el video fue retirado del sitio en que se enontraba.
“El #derechoadocumentar los operativos policiacos quedó asentado en la recomendación de la @CDHDF sobre el #1DMx que el @GobiernoDF aceptó” agregó desde su cuenta @roblesmaloof.
Jóvenes encapuchados se enfrentaron con granaderos en el Zócalo, quienes resguardaban los edificios históricos en la Plaza de la Constitución.
Vía redes sociales, ciudadanos reportan que hay detenciones sobre las calles Isabel La Católica y Regina en el primer cuadro de la ciudad. (Con información de Jonathan Nácar)