Por primera vez serán revelados los descubrimientos arqueológicos en Tlatelolco, entre las 33 piezas se encuentra el entierro de una joven de 20 años, localizada en el Gran Basamento en 2009, compuesta por una osamenta colonial extendida con los brazos cruzados y que estaba acompañada de una cruz latina, anillos de latón y dos botones de hueso. Estos objetos datan desde la fundación de esta ciudad mexica, en 1338, hasta el siglo XVIII y que fueron recuperadas durante más de 20 años de exploraciones.

 

Ayer por la noche se inauguró la exposición “Descubriendo la historia no escrita. 25 años de arqueología en Tlatelolco” que presenta una pequeña vasija Tláloc de madera de 6.6 centímetros de altura, cuchillos de pedernal, figurillas femeninas decapitadas de cerámica estucada, un entierro, vasijas, figurillas de cerámica, fragmentos de braseros ceremoniales y de un escudo circular de mitad del siglo XVI hecho con estuco de color rojo con blanco.

 

El 13 de octubre de 1987 se creó el Proyecto Tlatelolco por el arqueólogo Eduardo Matos para estudiar este centro ceremonial de la Gran Tenochtitlán, aunque en 1944 se hallaron los primeros vestigios de este lugar y durante la edificación de la unidad habitacional Nonoalco-Tlatelolco, que cumplirá 49 años el 21 de noviembre. Hasta la fecha los investigadores han explorado los templos de Ehécatl-Quetzalcóatl, Calendárico, Gran Basamento, Gran Plataforma Poniente, Templo Mayor.

 

La Plaza de las Tres Culturas es uno de los lugares más importantes de la Ciudad de México, por su pasado prehispánico, colonial y por escenario de la matanza de estudiantes por parte de militares en octubre de 1968. La Unidad Tlatelolco tiene 112 edificios distribuidos en tres secciones y mide 964 mil metros cuadrados. Los arquitectos Mario Pani y Ricardo de Robina planearon que 75% del terreno fuera para áreas verdes y de esparcimiento común, y 25% para edificios multifamiliares con servicios de primer nivel, que albergaran hasta mil habitantes por hectárea.

 

“Descubriendo la historia no escrita. 25 años de arqueología en Tlatelolco” exhibe dos cráneos descubiertos en 1998 en el centro productor de sal de San Miguel Nonoalco y un mural donde están representados los dioses creadores del tiempo: Cipactónal y Oxomoco, hallados en el Templo Calendárico en 1989. Esta es la primera muestra que nos lanza algunos destellos de cómo era la sociedad que dominó el norte de la Tenochtitlán, sus cultos, hábitos y cosmología. Es curioso, pero en Berlín el museo Pergamon realiza una exposición sobre Uruk, la primera gran ciudad identificable en la historia de la humanidad desde hace cinco mil años, y que se localiza en lo que hoy es Irak. Las ciudades del pasado emergen.