La Auditoría Superior de la Federación emitió un dictamen negativo sobre la operación de Diconsa en 2011, debido a las observaciones realizadas por 721.6 millones de pesos.

 

En el informe del resultado de la fiscalización superior de la cuenta pública 2011, el órgano fiscalizador precisó que del monto señalado, 364.9 millones de pesos corresponden a una diferencia entre los ingresos por ventas que reportó la empresa a la Cuenta Pública y la información financiera divulgada ese mismo año.

 

En los estados financieros de la empresa dictaminados al 31 de diciembre de 2011, se reportaron ventas por 11 mil 327.7 millones de pesos, un importe inferior a los 11 mil 692.6 millones de pesos que Diconsa presentó ante la Cuenta Pública ese mismo año.

 

Esta diferencia “se debió, entre otras causas, a que en los estados financieros se registró la venta de los 300 almacenes de acuerdo con las normas de contabilidad, mientras que el presupuesto refleja el flujo de efectivo, es decir, la cobranza de la venta tanto del ejercicio en vigor como de los cobros con cargo a ejercicios anteriores, sobre todo de los programas especiales”, explicó la Gerencia de Presupuesto de Diconsa en octubre de 2012.

 

De acuerdo con la Auditoría, Diconsa utilizó el Sistema de Integración y Control Presupuestario (Sicopre) para registrar sus ingresos reportados en la Cuenta Pública por la venta de bienes en 15 sucursales y 35 unidades operativas.

 

Sin embargo, además de omitir esta diferencia monetaria, la empresa no presentó evidencia que diera sustento a sus argumentos, e incumplió con los lineamientos para el proceso de cierre presupuestario del ejercicio fiscal 2011, de la elaboración de la Cuenta Pública y de la Ley General de Contabilidad Gubernamental.

 

Por ello, la Auditoría recomendó al órgano interno de control de Diconsa realizar las investigaciones pertinentes y, en su caso, iniciar el procedimiento administrativo correspondiente por los actos u omisiones de los servidores públicos que en su gestión no conciliaron 364.9 millones de pesos por concepto de venta de bienes reportada en la Cuenta Pública 2011, las cuales no formaron parte del monto presentado en sus estados financieros dictaminados ese mismo año.

 

INCUMPLE CON PRODUCTOS

 

En el manual de políticas y procedimientos para la supervisión de tiendas comunitarias se estipula que Diconsa debe consultar a las comunidades para conocer sus hábitos de consumo y así determinar los artículos que enviarán a cada una de sus tiendas.

 

Con base en esta demanda y el estudio socioeconómico con el que se constituye la operación de una tienda rural, la empresa asigna un financiamiento en especie a cada Comité Rural de Abasto, el inventario de esta mercancía es conocido como capital de trabajo.

 

En 2011, Diconsa determinó la reserva de baja de capitales de trabajo por 21.7 millones de pesos, sin embargo, la Auditoría registró que fueron 42.14 millones de pesos, el doble del monto determinado por la paraestatal.

 

La empresa no proporcionó evidencia de la política contable autorizada que especifique el procedimiento de considerar una cantidad adicional igual al monto determinado, ni explicó la base por la cual se realiza de esa forma.

 

Por si esto resultara poco, en la auditoría al Programa de Apoyo Alimentario, que la ASF también dictaminó como negativo, se fincaron responsabilidades a Diconsa por la entrega tardía de productos a las comunidades en 2011, lo que ocasionó que caducaran 18 mil 771 sobres de complementos nutricionales y leche.

 

Por si esto resultara poco, en la auditoría al Programa de Apoyo Alimentario, que la ASF también dictaminó como negativo, se fincaron responsabilidades a Diconsa por la entrega tardía de productos a las comunidades en 2011, lo que ocasionó que caducaran 18 mil 771 sobres de complementos nutricionales y leche.