Tras el fracaso de los marchistas varoniles en su intento por dar las marcas mínimas para asistir a la Copa Panamericana de Marcha de Lima, Perú, el presidente de la Federación mexicana de Asociaciones Atléticas (FMAA) Antonio Lozano Pineda señaló, debe plantearse qué se desea para la caminata mexicana.

 

En entrevista al término de las tres pruebas de la rama varonil donde no salió un solo andarín que lograra mejorar la marca exigida por la FMAA, para asistir a la Copa Panamericana de Caminata que se celebrará en Lima, Perú, el titular de este organismo dijo “debemos analizar qué deseamos, turistas deportivos o ser atletas competitivos”.

 

Al comentar que los marchistas se quejaron de que los registros pedidos por la FMAA, resultaron ser muy exigentes, Lozano Pineda señaló “habrá que preguntarle a ellos qué es lo que quieren de la marcha, porque en nuestro país exigirle a ellos que luchen por las medallas, es para que hagan honor a la historia de México, en esta especialidad”.

 

Mencionó que “cuando los resultados no dan para eso, nosotros tenemos que buscar recomponer el camino, aceptar la exigencia de lo que desea el país, que pide resultados y estos no sólo se logran con simples deseos”.

 

Por otra parte, el titular de la FMAA al momento de hacer un balance de la actuación de los andarines mexicanos en el XI Encuentro Internacional de Caminatal efectuado en esta ciudad, dijo que en términos generales era aceptable.

 

En la rama femenina, tres marchistas, dos de la categoría abierta que fueron Mónica Equihua y Rosalía Ortiz Cruz y una en la categoría juvenil, Alejandra Ortega lograron su lugar para participar en la Copa Panamericana de Caminata que se efectuará el 25 y 26 de mayo próximo en Lima, Perú.

 

Por lo que toca a la rama varonil, ningún andarín logró clasificarse a dicho certamen continental, pues nadie en las pruebas de 20 y 50 kilómetros, ni en la categoría juvenil pudieron dar las marcas mínimas pedidas por la FMAA, para poder representar a México en dicha competición.

 

Detalló que en el caso de los juveniles de la rama varonil, “se podría reconsiderar el darle otra oportunidad a estos deportistas, ya que si bien las marcas que pusimos no eran nada del otro mundo, sí eran para hacer competitivos a los marchistas mexicanos en las diferentes especialidades”.

 

Recordó que hace 25 años, México era una de los países referentes en la marcha mundial, “pero ya llevamos 12 años sin tener buenos resultados, que estamos en un declive muy pronunciado y estamos obligados a buscar la manera de recomponer el camino”.

 

Finalmente, estacó “quien no logra marca de tres horas 53 minutos al inicio de la temporada, no podrá bajar su registro a tres horas 45 minutos y que no se les olvide que por muchos años yo fuí entrenador y si bien la marcha no se mide igual que otras especialidades, los porcentajes de progresión, sí son medibles igual para todos”.