El secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez Marín, rechazó que la creación de esa dependencia tenga como fin la privatización de los ejidos del país o convertirse en una urbanizadora.

 

Luego de participar en el cónclave de senadores del PRI en el que se definió la agenda legislativa de cara al próximo periodo ordinario de sesiones planteó que, por el contrario, se busca fortalecer a los más de 30 mil ejidos y defenderlos jurídicamente de las presiones para su uso urbano y turístico, sobre todo en zonas costeras.

 

Indicó en ese sentido que existe “presión” en casi mil 300 de los más de 30 mil ejidos, cuyas tierras adquirieron valor.

 

Entonces, dijo, “la pregunta sería: ¿hay ejidatarios ricos? Fuera de los que están en las zonas costeras y de playas sumamente valiosas, la mayor parte de los ejidatarios son pobres a pesar de que en sus tierras se hayan construido fraccionamientos de gran valor”.

 

Ramírez Marín subrayó que lo que se busca con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) es que, al contrario, la tierra tenga su valor real y el ordenamiento urbano no sea sobre los terrenos de los ejidatarios y sobre sus derechos.

 

Remarcó que “el hecho de que nos enfoquemos a lo urbano tiene más bien una razón de defensa tanto del desarrollo urbano, que es responsable de comprar tierras baratas y entonces inmediatamente construir. Al dar un mayor valor a la tierra también estamos reforzando las facultades del municipio para decir: aquí no se construye”.

 

Asimismo, agregó, reforzando las facultades de los gobiernos estatales al decir esta es zona productiva, lo que se hará con el Plan Nacional de Desarrollo Urbano.

 

El titular de la Sedatu, antes de Reforma Agraria, puntualizó que no ve ninguna señal de que la secretaría se convierta en un instrumento de privatización, pues no tiene ningún instrumento legal para hacerlo.

 

Es así, puntualizó, porque tiene todas sus atribuciones anteriores e incluso las incrementa para que los ejidatarios que así lo quieran obtengan la mejor utilidad por su tierra.

 

“No es el propósito de la secretaría convertirse en una urbanizadora”, recalcó el funcionario de la dependencia federal.