París. La policía francesa efectuó hoy una operación nacional antiterrorista que dejó un muerto y condujo al arresto de 11 sospechosos, horas después de que el ministro del Interior, Manuel Valls, habló sobre una amenaza en el país.

 

La intervención policial tuvo lugar la mañana de este sábado en varias ciudades de Francia contra círculos salafistas, que el fiscal de París, François Molins, calificó como “una red de delincuentes, convertidos al Islam radical”.

 

Un hombre murió en la ciudad de Estrasburgo, en el este del país, y 11 personas más están bajo custodia, indicó el fiscal, quien aseguró que la policía antiterrorista continuará la búsqueda de otros dos sospechosos.

 

La operación se llevó a cabo en relación con el caso de un ataque con granada, perpetrado contra una tienda de abarrotes judía en septiembre pasado.

 

Durante las pesquisas, los investigadores identificaron la huella digital de un individuo conocido por su pertenencia al movimiento yihadista, explicó Molins, citado en reportes del diario francés Le Figaro.

 

Este hombre, de 33 años e identificado como Jérémie Sidney, resultó gravemente lesionado en Estrasburgo durante un intercambio de disparos con la policía, para finalmente morir debido a las heridas que recibió.

 

Otras 11 personas fueron detenidas y puestas en custodia en Cannes, en la región de París, y en Torcy, en el norteño departamento de Seine-et-Marne. Todos los arrestados son de nacionalidad francesa y tres de ellos tienen antecedentes penales.

 

El primer ministro francés Jean-Marc Ayrault destacó que esta fue la mayor operación antiterrorista, conducida por la Dirección Central de Inteligencia Interna y la rama de la policía judicial que lucha contra el extremismo, con al apoyo de los servicios locales.

 

En una declaración, el presidente francés François Holland reiteró la total determinación del Estado para proteger a los franceses contra todas las formas de amenaza terrorista y aseguró haber ordenado “todas las medidas de vigilancia necesarias” para ello.

 

El ministro del Interior recordó anoche la existencia de una “amenaza terrorista” en Francia, al sostener que este Islam radical “se alimenta de fantasía, odios contra nuestro país y los judíos”.