“Mi plan de vida era Mexicana de Aviación y nunca imaginé crear mi propia empresa”, afirma Gabriela Guinea, directora y fundadora de Aeterna, una comercializadora de purificadores de agua en la zona metropolitana del Valle de México.

 

Hace más de dos años era directora de Planeación Estratégica en la aerolínea más importante de México, pero con su salida del mercado el 28 de agosto de 2010 se “inicia con un recorrido de querer abrir empresas y consultoras en el sector aeronáutico, pero ninguna cuajó ni se fundó”, dice en entrevista con 24 HORAS.

 

“Nos buscaron para fundar una consultoría de aviación, después con la terquedad de estar en la industria de la aviación se buscó comprar una empresa que estaba relacionado y daba servicios en tierra”.

 

Después de realizar la evaluación de los negocios, “nos dimos cuenta que la salida de Mexicana de Aviación del aire, desgraciadamente le ha pegado a otras industrias relacionadas”, explica la emprendedora apoyada por el centro de incubación del Tecnológico de Monterrey.

 

“El capital invertido en este proyecto son los ahorros de toda mi vida, lo cual sí me genera temor, angustias y tensiones. Sin embargo, sabemos que hay mercado, estamos haciendo las cosas por nota y tenemos ya construida la infraestructura para comenzar con la comercialización de los filtros”.

 

Recuerda que las funciones en la aerolínea eran crear los itinerarios de la red de rutas, selección de nuevos destinos, identificar rutas no productivas, la maximización del uso de la flota.

 

La empresaria detalla que la investigación de mercado realizada arrojó que hay seis millones de viviendas con suministro de agua potable en la zona metropolitana del Valle de México. De ese total, dos millones de viviendas del nivel socioeconómico C son nuestro objetivo.

 

“Vamos a las viviendas que están conformadas por cinco integrantes, que es el promedio de lo que hoy hay. Su consumo es de aproximadamente tres botellones de agua a la semana, y el purifiltro significa un ahorro muy importante”.

 

El precio del filtro es de dos mil 465 pesos y el consumo de tres botellones de agua de cuatro mil pesos al año. En seis meses se paga la inversión, añade.

 

Según Gabriela Guinea, el objetivo para el próximo año será vender cinco mil purificadores en la zona centro, ya de momento se vendieron equipos en Los Cabos, Guadalajara y Monterrey.

 

“Hay angustias e inquietudes, pero si se ha tenido mucho éxito en otras tareas, por qué en ésta no se vaya a tener”, expresa.

 

–Se escucha muy emocionada con el proyecto. ¿Alguna vez imaginó hacer su empresa, cuando trabajaba en Mexicana? –, se le pregunta por teléfono.

 

–Por su puesto que no. Mi plan de vida era Mexicana de Aviación. Sin embargo, la vida no es como uno la planea. Nadie espera que la empresa dejara de operar. Con toda franqueza estoy contenta y llena de proyectos.

 

–¿Les gusta esta nueva faceta de vida?

 

–Yo tenía el trabajo de mis sueños. Nunca en la vida me hubiera cambiado de empresa. Sin embargo, dejó de operar ¿qué le hacemos?

 

–¿Qué sintió cuando les anuncian que deja de operar?

 

–Se sintió una tristeza y fue muy difícil entender qué fue lo que sucedió ahí, a lo mejor algún día nos enteramos.

 

Se vale llorar un poco y aprovechar las oportunidades al quedar desempleadas por la salida del mercado de la aerolínea, que realmente fue una tragedia, explica.

 

“De mantenernos en la lucha sindical es estar sujeto a otras voluntades y no es mi estilo y yo prefiero ser dueña de mi destino y la única forma es resolviendo mi problema a partir de una empresa”.

 

–¿Desde la oficina que ocupaba en Mexicana era previsible el concurso mercantil?

 

–No… prefiero no platicar de ello, porque ahí hay demasiadas cosas que sucedieron. Es un tema muy complicado. Ya sabes, eso es como los accidentes, son una serie de detalles uno tras otro, tras otro, tras otro, tras otro… que cuando se juntan provocan una catástrofe. Y la verdad que deseo que Mexicana salga adelante, lo más pronto posible.

 

“Si yo hubiera querido ser empresaria, lo hubiera hecho a los 20 años y no fue mi caso. Mexicana es un capítulo cerrado y éste es uno nuevo que me da entusiasmo”.