La titular de la PGR, Marisela Morales Ibáñez, confirmó que algunos focos de violencia que se han registrado en las últimas semanas en algunas entidades obedecen a una posible división en el grupo delictivo de Los Zetas, así como a la disputa de sus territorios con otras organizaciones delictivas.

 

En entrevista, tras inaugurar un curso en materia de investigación y prevención de la tortura, Morales dijo que tiene reportes de inteligencia que apuntan a que este sería uno de los factores por los cuales se han presentado focos de violencia en Zacatecas o San Luis Potosí.

 

“Cuando se empieza a restarles fuerza a algunos líderes, ya sea porque se les detiene o porque ya están más cercados y ya hay más operativos para su aprehensión, se empiezan a escindir estos grupos, empiezan a dividirse y esto también es un factor importante para aumentar la violencia”, afirmó Morales.

 

De acuerdo con investigaciones ministeriales, el hallazgo de 14 cuerpos abandonados hace dos semanas en San Luis Potosí es consecuencia de una presunta disputa entre los máximos líderes de Los Zetas, Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, y Miguel Ángel Treviño Morales, El Z-40.

 

La titular de la PGR afirmó, además, que otro de los detonantes de los hechos violentos es la disputa de los territorios que llevan a cabo de forma cada vez más radical las principales organizaciones del narcotráfico.

 

Subrayó que las “plazas” no solo so importantes para los narcotraficantes por las rutas de trasiego de drogas a gran escala sino además por el control de los puntos de narcomenudeo en el mercado interno.

 

24 HORAS publicó la semana pasada que el grupo delictivo de Los Zetas estaba experimentando dificultades para mantener bajo control los estados en los que se concentra su operación, debido a la presión de otros cárteles y a sus propias disputas internas.

 

Tamaulipas, Veracruz, Nuevo León, Coahuila, Zacatecas y San Luis Potosí , son los estados con fuerte presencia de Los Zetas y que ahora estarían en disputa, principalmente por la presión de sicarios y células afines al Cártel de Sinaloa, que dirige Joaquín El Chapo Guzmán.

 

Morales Ibáñez hizo énfasis en que continuarán los operativos y el despliegue de las fuerzas federales en las zonas de alta incidencia delictiva, con el objetivo de ir cercando paulatinamente a los líderes de Los Zetas y a los de cualquier otro grupo delictivo.