Washington. Más de 300 mil empleos relacionados con la educación se perdieron en Estados Unidos desde que terminó la recesión, afirmó hoy aquí el presidente Barack Obama, tras llamar a invertir más en ese sector.

 

Esta es una cifra que contrasta con la recuperación económica que se ha registrado en los últimos meses en el país, indicó el mandatario en su mensaje semanal.

 

Alertó que como resultado de esa situación el índice nacional de estudiantes por maestros aumentó 4.6 por ciento de 2008 a 2010, lo que anula todos los adelantos logrados desde el 2000.

 

Los grupos con mayor número de alumnos tienen consecuencias negativas para el futuro de los estudiantes de este país en un momento en que la educación jamás ha sido más importante para encontrar un buen empleo y mantener nuestra competitividad como nación, advirtió.

 

Este sábado la Casa Blanca dio a conocer un nuevo informe que mostró que la pérdida de maestros y de otro personal de la educación está obligando a comunidades a tomar medidas difíciles que perjudican la educación y el futuro de las nuevas generaciones.

 

Señaló que entre esas medidas figuran el aumento en el número de alumnos por grupo y la reducción del ciclo escolar, así como la disminución de la jornada escolar.

 

En un momento en que el resto del mundo está en una carrera por sobrepasar a Estados Unidos en la educación, los recortes al presupuesto “obligan a nuestros hijos a permanecer en aulas abarrotadas, a cancelar programas de pre-escolar y acortar el año escolar”, dijo Obama.

 

“Esto es lo opuesto a lo que debemos estar haciendo como país”, expuso el mandatario.

 

Subrayó que expertos académicos han considerado que con ese retroceso los estudiantes reciben menos atención y menos oportunidades de sacarle provecho a su educación.

 

Obama presentó un programa que incluye impedir las cesantías de los maestros, invertir en una reforma general y fortalecer la educación pública.

 

El plan del presidente puede proveer 25 mil millones de dólares para impedir los despidos y apoyar a cientos de miles de empleos de maestros y otros relacionados con la educación.

 

Pero lamentó que los legisladores republicanos en el Congreso continúan bloqueando las inversiones en la educación y la seguridad económica de la nación.

 

Denunció que en lugar de eso, los republicanos aprobaron un presupuesto que recortaría fondos para la educación, al tiempo que concedería beneficios fiscales masivos a millonarios y multimillonarios.

 

El presupuesto aprobado por los republicanos en el Congreso recortaría gastos discrecionales no relacionados con la defensa en casi un 20 por ciento, resaltó.

 

Si los recortes se distribuyen de manera equitativa, ese presupuesto implicaría dos mil 700 millones de dólares en recortes a subvenciones básicas para la educación.

 

Eso significa que unos 38 mil maestros y asistentes de maestros podrían perder sus empleos, alertó.

 

También se harían recortes a la educación pre-escolar y a la educación especial, lo que deteriora de manera significativa la capacidad de las escuelas para atender de la mejor manera a sus estudiantes.

 

“Eso no tiene lógica. Eso está mal. Ese plan no invierte en nuestro futuro, sino que perjudica nuestro futuro”, aseveró el presidente.

 

“Si queremos que Estados Unidos lidere en el siglo XXI, nada es más importante que ofrecerles a todos la mejor educación posible, desde el día que comienzan el pre-escolar hasta el día que terminan su carrera”, enfatizó.