QUITO. El Gobierno de Ecuador comunicó que ha concedido asilo al fundador de WikiLeaks, el australiano Julian Assange, y dijo “confiar” en que Londres otorgue las garantías y el salvoconducto pertinentes para que él pueda viajar a Quito.

 

De manera inmediata, el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, consideró que no hay razones legales para otorgar un salvoconducto a Julian Assange. La inmunidad diplomática no debe ser utilizada para “dar refugio” a supuestos delincuentes y que el proceso en Suecia tendría “garantías” legales. “La inmunidad existe para permitir que las embajadas lleven a cabo funciones diplomáticas adecuadas, y dar refugio a supuestos delincuentes no es una de ellas y tampoco impedir el proceso legal en un país”, apuntó William Hague en rueda de prensa.

 

En línea con lo que ya había avanzado en un comunicado el Foreign Office, Hague insistió en que la obligación legal del Reino Unido es entregar al fundador de WikiLeaks a Suecia, donde se le acusa de delitos sexuales que él niega, y dijo que su país no reconoce el concepto de “asilo diplomático” otorgado por Ecuador.

 

El ministro ecuatoriano de Relaciones Exteriores, Ricardo Patiño, en una rueda de prensa en la sede de la Cancillería, señaló que la decisión de otorgarle asilo a Assange se sustenta en el derecho internacional y en la consideración de que la vida de Assange corre peligro, si finalmente es extraditado a Estados Unidos.

 

Patiño dijo que su Gobierno “confía” en que el Reino Unido ofrecerá las garantías o el “salvoconducto correspondiente” para que Assange pueda llegar a Ecuador.

 

Precisó que la decisión ecuatoriana fue comunicada al encargado de negocios de Reino Unido en Quito, por parte del vicecanciller, Marco Albuja.

 

Assange, reclamado por la justicia sueca por delitos sexuales y responsable de la divulgación de miles de documentos secretos, principalmente de EU, está refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde junio pasado.

 

Incluso mencionó la posibilidad de que sus colegas de la Alianza Bolivariana para Nuestra América (Alba) y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reúnan este sábado en Quito.

 

El ministro aseguró que la concesión del asilo a Assange obedece también al temor que ha expresado sobre “la eventual persecución política que podría sufrir en un tercer Estado, el mismo que podría valerse de su extradición al Reino de Suecia para obtener a su vez la extradición ulterior a aquel país”.

 

Se refirió a la posibilidad de que finalmente Assange sea extraditado a Estados Unidos, donde sus abogados temen que sea juzgado y condenado a cadena perpetua o a muerte por la “desclasificación de información comprometedora” para Washington.

 

Según la “evidencia jurídica” recogida por el Gobierno ecuatoriano, tiene fundamento que si Assange es extraditado a EU “no tendría un juicio justo, podría ser juzgado por tribunales especiales o militares” y podría ser sometido a tratos crueles o degradantes, dijo.