Michael Phelps le ha dicho adiós a los Juegos Olímpicos y a la natación al competir en la última prueba de su vida, el relevo de 4×100 estilo libre, el cual dará forma definitiva al legado de un atleta único, que ha fijado una cantidad de récords olímpicos que probablemente nunca sean superados. Se va como el deportista que más preseas ha ganado (21), que más medallas de oro ha acumulado (18) y como el único que ha conquistado tres veces seguidas una misma prueba (los 200 combinados). Y ni hablar de la marca más impresionante de todas: ocho medallas de oro en una misma justa, la de Beijing de 2008.

 

Michael, día uno de retiro. ¿Alivio, melancolía, nostalgia, incertidumbre? ¿Qué sientes?

 

Un poco confundido. No estoy seguro de poder explicar lo que siento. Pero es un buen sentimiento el poder repasar mi carrera y saber que pude obtener todo lo que tuve como meta, es algo que celebraré por siempre, poder retirarme exactamente como quería y acabar mi carrera tal como quería, no podía tener nada mejor que eso.

 

Pero. todavía podías seguir compitiendo, ¿por qué dejarlo, por qué no ir a los Olímpicos de Río, por qué no seguir nadando?

 

Creo que llega un punto en tu carrera en que sientes el tiempo, supongo que simplemente sientes que llega el momento perfecto para retirarte, no me veía compitiendo dentro de cuatro años y nunca me interesó seguir más allá de los 30 años, hice todo lo que quería y sólo eso basta, poder revisar mi carrera y estar orgulloso de todo lo conseguido.

 

¿De qué está hecha una leyenda olímpica, de qué está hecho Michael Phelps? ¿Disciplina, talento? ¿Qué es lo más importante?

 

Probablemente todo combinado… Es una ecuación que lleva mucho: trabajo duro, dedicación, pasión, talento… Y ese todo es lo que hace que un atleta reciba recompensa, se convierta en campeón… No es sólo físico, sino también mental.

 

Y ahora tu vida realmente cambiará…

 

Sí, y no estoy seguro de qué es lo que haré desde ahora o qué esperar, pero me motiva mucho entrar al siguiente capítulo en mi vida.

 

Dicen que todo récord está hecho para ser roto, pero tus récords parecen realmente invencibles…

 

Todo puede pasar, todo es rompible. Lo sé porque en donde he puesto mi mente he conseguido alcanzar la meta, y nunca me importó que me dijera alguien que era imposible o que no podría lograrlo, siempre me di la oportunidad de intentarlo.

 

Es raro, porque nunca vi mis medallas como una colección, y probablemente ahora las veré todas colocadas juntas y podré reflexionar sobre todo lo que sucedió.

 

¿Algo en particular que vayas a extrañar?

 

No sé todavía, supongo que mi vida estuvo tan estructurada por tanto tiempo, hubo una estructura fija en mi vida por veinte años… Despertarme temprano, irme a la piscina, tomar una siesta, comer, trabajar de nuevo, regresar y dormir, será raro acostumbrarme al principio pero me emociona hacerlo.

 

Felicidades Michael…

Gracias…

 

@albertolati

 

 

 

 

 

 

 

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