Organizaciones adherentes al PRI propusieron a Javier Oliva Posada y Beatriz Pagés como fórmula para la presidencia y la secretaria general del partido en el Distrito Federal, donde aseveraron hay un “cochinero” por falta de democracia.

 

En rueda de prensa, Nabor López, del Movimiento Nacional de Crítica Socio Política; Martín Alberto Sánchez, del Movimiento Social por la Democracia, y Miguel Ángel Gudiño, de la Corriente Democratizadora entre otros, exigieron a la dirigencia nacional priista “dar un golpe de timón en el PRI capitalino”.

 

Denunciaron que el PRI en el Distrito Federal es rehén de los grupos que comandan Beatriz Paredes Rangel, la senadora María de los Ángeles Moreno y el diputado federal Cuauhtémoc Gutiérrez.

 

También consideraron necesario que sean llamados a cuentas los dos grupos antagónicos que han mantenido al partido como rehén y que sólo buscan el control de las prerrogativas como un interés de grupo.

 

Pidieron al líder nacional del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, desterrar los cacicazgos nocivos para el partido en la Ciudad de México e instruir a los sectores y organizaciones no condicionar su respaldo mediante la firma que avale las fórmulas de aspirantes a la dirigencia.

 

“Basta ya de que el partido en el Distrito Federal sea un lastre para los candidatos a la Presidencia de la República, muestra de eso es que en las pasadas elecciones del 1 de julio adolecimos de buenos candidatos a los diferentes puestos de elección popular”, expusieron.