Madrid. El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, aseguró hoy que aun no ha tomado la decisión de pedir al Banco Central Europeo (BCE) su intervención para comprar deuda española en el mercado secundario.

 

En rueda de prensa al finalizar la reunión semanal del Consejo de Ministros, el mandatario hizo un balance de la crisis económica en sus primeros siete meses de gestión, y sostuvo que primero quiere conocer qué plantea el BCE para saber si solicita ayuda.

 

“Quiero conocer cuáles son esas medidas, y en vista de eso tomaremos una decisión, no tengo tomada la decisión, y lo que haré será conforme a los intereses generales de los españoles”, aseveró.

 

De esta manera, Rajoy respondió a las palabras del titular del BCE, Mario Draghi, quien dijo la víspera que se intervendrá en quitar presión a la deuda de países con problemas financieros, solo si éstos la solicitan y con algunas condicionantes.

 

En la rueda de prensa, Rajoy fue preguntado si piensa promover algún refuerzo democrático ante el cambio de acción de gobierno respecto de lo ofrecido en su programa electoral, algo que descartó al asegurar que tiene un mandato mayoritario de los españoles.

 

“El planteamiento que hice a los españoles fue crecer y crear empleo. Dije tres cosas, la primera hay que reducir el déficit público, la segunda hacer reformas estructurales, como la laboral, y tercero la reestructuración del sistema financiero”, manifestó.

 

“¿Referéndum?, nadie se lo ha planteado ni ningún grupo político me lo ha pedido. El gobierno tiene un mandato claro para un periodo de cuatro años, y el objetivo es crecer, crear empleo y tomar decisiones para ello”, expresó.

 

Abundó que con el líder del opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba, habla frecuentemente y cuenta con su apoyo en cuestiones como la posición de España en las reformas económicas de la Unión Europea (UE).

 

Consideró como “normal y lógico” que la oposición política no esté de acuerdo con sus medidas para reducir el déficit público, “pero en estas circunstancias también le es difícil plantear una alternativa”.

 

Además negó que debido al desgaste que genera la gestión de la crisis se plantee una remodelación de su gabinete.

 

En su comparecencia ante los medios, Rajoy defendió las reformas económicas como la laboral, la del sistema financiero, de estabilidad presupuestaria, así como los recortes de gasto público y aumento de impuestos.

 

“El gobierno se siente comprometido con claro mandato de los españoles, que es arreglar los problemas del país, no prometimos milagros porque sabíamos que no los iba a haber”, aseveró.

 

“Hemos llevado a cabo una labor intensísima. Muchas decisiones se pueden discutir, pero nadie puede decir no se han tomado decisiones ni se ha gobernado en circunstancias que son difíciles”.

 

“Quiero decirles que el gobierno sabe a donde va, lo que tiene que hacer y que si la situación es difícil vamos a superarla como en otras ocasiones”, agregó Rajoy al asegurar que seguirán en los próximos meses nuevas reformas económicas.