El presidente Felipe Calderón culpó a los dirigentes de Acción Nacional por la debacle del partido en la capital del país.
En una reunión privada en Los Pinos celebrada el miércoles pasado, Calderón atribuyó los pésimos resultados electorales a la designación de candidatos “pigmeos”; en días pasados, el mandatario ha tenido encuentro con consejeros de su partido para analizar los resultados de la elección del 1 de julio.
No obstante, el Ejecutivo federal reconoció ante los casi 30 consejeros nacionales del DF su responsabilidad por la candidatura de Isabel Miranda de Wallace a la jefatura de Gobierno capitalino que no rebasó los 650 mil votos.
Aunque recriminó que el partido y la militancia dejaron sola a la activista durante los 60 días de campaña.
Consejeros presentes en la reunión aseguraron que durante el encuentro hubo una discusión intensa, en la que Calderón planteó la refundación del partido, pero se concretó en la propuesta de que los candidatos sean designados por la dirigencia y no mediante elecciones internas, como sucede actualmente.
Asimismo, aceptó que hay fallas de gobierno que se plasmaron en las urnas, principalmente, en comunicación de logros y también la reforma electoral que los afectó.
Felipe Calderón reclamó también el manipuleo del padrón de militantes en el DF.
Al hablar de las anomalías del padrón, Calderón pidió a su esposa Margarita Zavala platicar el caso que observó cuando votó en la interna.
En esa ocasión, vio que una mujer le estaba indicando a otra por quién votar y se acercó para poner orden, pero fue rechazada por la militante de forma grosera.
Sin embargo, los consejeros se sorprendieron de esa anécdota porque ocurrió en la delegación Álvaro Obregón y la gente a la que se refirió la primera dama fue a la afiliada por Mariana Gómez del Campo.
Uno de los principales reclamos de la militancia a Gómez del Campo y Jorge Romero, delegado electo en Benito Juárez, es por adoptar prácticas clientelares y afiliar masivamente a ciudadanos mediante el uso del programa social Oportunidades.
Gómez del Campo es sobrina de Margarita Zavala y Romero era su pareja.
La reunión se tornó ríspida debido a que el ex presidente del PAN en el DF, Adrián Fernández, culpó directamente a Gómez del Campo y a Romero por la crisis del panismo en el DF, y los llamó “caciques y corruptos”.
Romero se defendió y ambos se lanzaron acusaciones frente al Presidente.
Tras esa discusión, Fernández le reprochó al mandatario que ha sido incorrecta la forma como el gobierno ha intervenido en asuntos internos del partido.
Los asistentes afirmaron que Diego Fernández de Cevallos, consejero nacional del DF y ex candidato a la Presidencia, en 1994, criticó enérgicamente a Gustavo Madero, presidente nacional del PAN, por aliarse con el PRD en el conflicto postelectoral.
Asimismo, se descalificó a Josefina Vázquez Mota por pensar que los votos que obtuvo fueron gracias a ella y no al partido, ya que hubo candidatos con mejores resultados.
En la reunión no participaron Mariana Gómez del Campo ni el líder del PAN en el DF, Juan Dueñas.