Buenos Aires. El Mercado Común del Sur (Mercosur) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) analizarán a partir de este jueves la eventual expulsión de Paraguay de esos bloques regionales por violar la cláusula democrática.

 

La cumbre semestral del Mercosur elevó su perfil luego que el pasado viernes el presidente paraguayo Fernando Lugo fue destituido por mal desempeño de sus funciones por el Senado de su país, en un juicio político que duró apenas unas horas.

 

En el encuentro regional, que se realizará en la ciudad de Mendoza, distante unos mil kilómetros al oeste de Buenos Aires, se debían discutir aspectos meramente comerciales, pero ahora estará copado por la crisis institucional paraguaya.

 

De hecho, la Unasur aprovechó la cumbre presidencial del Mercosur para convocar a su vez a una reunión de emergencia para el próximo viernes, por lo que se prevé que vendrán más mandatarios de los que inicialmente se esperaban.

 

En principio estaba confirmada la participación de la presidenta anfitriona, Cristina Fernández, además de la brasileña Dilma Rousseff, el uruguayo José Mujica, el boliviano Evo Morales y el chileno Sebastián Piñera.

 

Tras la destitución de Lugo, los presidentes de Perú, Ollanta Humala, y de Colombia, Juan Manuel Santos, también anunciaron su participación en la Cumbre de la Unasur.

 

El gran ausente será el propio Lugo, quien el fin de semana reveló que, aún estando destituido, vendría a la Cumbre de Mendoza, pero finalmente esta víspera se desistió al considerar que su presencia presionaría las definiciones del resto de los mandatarios.

 

La mayoría de los gobernantes calificaron la destitución de Lugo como un golpe de Estado, razón por la cual su sucesor y quien fuera su vicepresidente, Federico Franco, fue excluido de la Cumbre que iniciará este jueves.

 

Lo que tendrán que definir los jefes de Estado es si Paraguay quedará expulsado de los bloques regionales por violar la cláusula democrática que obliga a los estados miembros a respetar sus procesos democráticos.