A partir de julio próximo, quienes soliciten un préstamo ante el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) serán sujetos de consulta en el Buró de Crédito, con lo cual el financiamiento podría ser otorgado de manera diferenciada o postergado.

 

En entrevista, el gerente de Innovación e Iniciativas Estratégicas del organismo, Enrique Aranda Vargas, dio a conocer que este nuevo mecanismo será sólo un elemento más a considerar en el índice de riesgos que maneja el Infonavit.

 

El propósito, explicó, es evitar el sobreendeudamiento del acreditado y que el apoyo para la vivienda se convierta en una carga para el trabajador.

 

Subrayó que una vez que el trabajador haga su solicitud, el Infonavit consultará el historial en el Buró de Crédito, tomando en cuenta instituciones bancarias y tiendas departamentales.

 

Es importante hacer notar que no entrarán en esta consideración los pagos de ciertos servicios como la telefonía celular o el sistema de Cable. “Sólo nos vamos a ir con créditos con entidades financieras, tiendas departamentales o una tarjeta de crédito”, aclaró.

 

Comentó que en función de los retrasos que tenga el trabajador en esos créditos se determinará su otorgamiento de apoyo para vivienda, para lo cual -dijo- se aplican los niveles de riesgo Bueno, Medio y Por mejorar.

 

Enrique Aranda explicó que cuando el derechohabiente tenga menos de 30 días de atraso en su crédito, se considerará dentro del rango positivo y por lo tanto en el índice de riesgo “Bueno”, por lo que será posible prestarle la totalidad del apoyo al que tiene derecho.

 

Aunque aclaró que el crédito es un derecho del trabajador, planteó si éste, al obtenerlo ve minado su ingreso en porcentajes considerables, se le hará la sugerencia de postergar el financiamiento hasta que solvente algunos de sus compromisos.

 

Si además de calificar dentro del índice de riesgos “Bueno” el trabajador tiene un historial crediticio positivo en el Buró, el Infonavit pedirá únicamente tres bimestres de cotización, lo que “es un buen incentivo”.

 

Si en la consulta el trabajador resulta con créditos con retrasos en el pago de hasta 120 días, equivalentes a cuatro meses, se consideraría con un nivel de riesgo “Medio”, en tanto que si el retraso es mayor a 12 meses se tratará de una calificación “Por mejorar”, abundó.

 

Aranda Vargas comentó que para quienes tengan un índice de riesgos “Medio”, ya con las referencias del Buró, el Infonavit pedirá en garantía 7.5 por ciento del valor de la vivienda, lo que puede ser tomado del saldo en la subcuenta de vivienda.

 

Para el índice de riesgos “Por Mejorar”, detalla que el monto del crédito para vivienda será sólo de 80 por ciento e igualmente se retendrá 7.5 por ciento del valor de la vivienda.

 

“No estamos en ningún momento restringiendo el derecho al crédito. Lo único que estamos haciendo es apoyando a los trabajadores para que no se sobre-endeuden y en alguna emergencia no tenga un problema mayor que lo lleve a caer en incumplimiento”, agregó.