A más tardar en julio, la Procuraduría General de la República (PGR) prevé relevar de su cargo a varios delegados regionales que no alcanzaron los resultados esperados, en el marco de una segunda fase del proceso de depuración de altos mandos, instruido por la titular Marisela Morales.
Fuentes de la dependencia federal informaron a 24 HORAS que en la “cuerda floja” se encuentran los titulares de las delegaciones de ocho estados del país, entre los que destacan los casos de Veracruz, Tamaulipas o Sinaloa, donde han acontecido hechos recientes de violencia, que han dejado más de 50 muertos.
Sin embargo, en esta nueva evaluación que lleva a cabo la procuraduría y que la semana pasada le costó el puesto a seis delegados, también se están tomando en cuenta aspectos como la eficiencia ministerial, la coordinación con otras autoridades y la calidad de las investigaciones.
La procuradora Morales y su equipo cercano iniciaron desde el mes pasado la revisión a profundidad del desempeño de los delegados estatales, quienes en su mayoría apenas cumplirían un año en su cargo.
“En términos generales, la procuradora no está satisfecha con los resultados en varias partes del país, pero hay algunos casos que se están analizando y donde se considera que no se han hecho los esfuerzos puntuales que se requirieron hace prácticamente un año”, indicaron en la dependencia federal.
Las delegaciones que se encuentran en “la mira”, según lo dicho a este diario por autoridades de PGR, son las de Tamaulipas, Nuevo León, Veracruz, Sinaloa, Jalisco, Sonora, Tabasco y Baja California.
Algunos de estos estados han sonado en los últimos días por hechos de violencia que ya son investigados por la propia PGR, aunque no a través de sus delegaciones sino de sus fiscalías centrales.
Entre estos casos se encuentra el homicidio de cuatro colaboradores de medios de comunicación en Veracruz, entre ellos una reportera y tres fotógrafos; la matanza de 23 personas acontecida el fin de semana en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y el deceso de más de 27 personas en varios tiroteos en Sinaloa, principalmente en la zona de Choix.
El verano del año pasado la titular de la PGR hizo una rotación completa de los 32 delegados regionales de la dependencia, con la finalidad de mejorar el trabajo ministerial y a su vez, eficientar la coordinación con otras autoridades para abatir la incidencia de delitos federales.
No obstante, los resultados del primer bimestre del año en materia de incidencia del orden federal, reunidos por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, mostraron un avance marginal. En enero y febrero de este año se registraron 22 mil 872 ilícitos, solo unas decenas menos que en el mismo periodo del 2011, cuando la cifra fue de 22 mil 953 delitos federales.
A esto se suma una “caída” en la eficiencia ministerial respecto a las averiguaciones que se inician y a las personas que se consignan en varios estados, de acuerdo con lo que se dijo en la dependencia.
Los datos en este sentido no pudieron ser verificados por este diario, pues la estadística de la PGR está deshabilitada por el periodo de veda electoral.
En ese contexto fue que Morales puso en marcha una nueva fase del referido proceso de depuración en cargos de alta responsabilidad, situación que la semana pasada generó los primeros relevos en las delegaciones estatales de Puebla, estado de México, Coahuila, Guerrero, Michoacán y Durango.
En varios casos la titular de la PGR se ha puesto en contacto con sus homólogos locales e incluso con los gobernadores de los estados, para conocer el nivel de coordinación que se tienen con los delegados y si estos se han mostrado participativos en estrechar los vínculos.
Llegarán 200 agentes del MP
A la par del proceso de depuración, la PGR continúa impulsando por instrucciones de la titular, un relevo generacional tanto en las agencias del Ministerio Público, así como en las filas de la Policía Federal Ministerial (antes Agencia Federal de Investigación).
Datos de la Procuraduría señalan que antes de que termine esta administración federal, se concluirá la capacitación de por lo menos 200 agentes del Ministerio Público de la Federación, que sustituirán a aquellos que serán ascendidos, los que están cerca de la jubilación, o los que cuentan con quejas o un balance negativo en torno a su desempeño.
La capacitación de los futuros servidores públicos se está llevando a cabo en el Instituto nacional de Ciencias penales (Inacipe), donde el plan de estudios comprende, además de todo los relacionado con el Derecho, materias especializadas tanto en derechos humanos así como en el nuevo sistema penal acusatorio.
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