La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) se declaró en alerta después de que se detectara un caso de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), mejor conocida como la enfermedad de las “vacas locas”, en el estado de California, en Estados Unidos

 

La dependencia informó que mantendrá las medidas de control sanitario que estableció desde hace más de ocho años para evitar el ingreso de ganado bovino con este padecimiento, además de que seguirá el intercambio de información con el Departamento de Agricultura de Estados Unidos.

 

Ese organismo dio a conocer ayer por la mañana el hallazgo en California, el cuarto en la historia de ese país, además de poner en alerta a las autoridades internacionales y a sus socios comerciales.

 

Los servicios veterinarios de Estados Unidos informaron al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), que depende de la Sagarpa en México, la presencia de una vaca lechera que no ingresó a la cadena de suministros de carne y que presentaba el padecimiento.

 

Senasica precisó que el ganado del lugar donde se presentó el caso, o animales emparentados, no habían sido exportado a nuestro país.

 

Sin embargo, México mantendrá en operación un programa de vigilancia activa en todo el país para la detección de la EEB, así como la implementación de medidas de control para evitar el ingreso de esta enfermedad en la cadena alimenticia animal y humana.

 

Entre las medidas están la cuarentena vitalicia y vigilancia del ganado proveniente de Estados Unidos y Canadá, el muestreo y vigilancia de alimento de importación, la prohibición a la importación de harinas de rumiante y la restricción a la importación de carne de bovino mayor a 30 meses.

 

Estas acciones se aplican en territorio nacional desde 2004, cuando se aplicó la alerta sanitaria por esta enfermedad en la carne de bovino ante los casos registrados en el país vecino.

 

Desde entonces, las autoridades mexicanas implementaron estrategias que son reconocidas y supervisadas por la Organización Mundial de Sanidad Animal.

 

Esta enfermedad fue reconocida en 1994, después de que el gobierno de Inglaterra aceptara la muerte de más de 180 personas por el consumo de carne contaminada.

 

Después de esto, la enfermedad -que se caracteriza por dolores de cabeza, pérdida de memoria y finalmente demencia-, ha causado la muerte de cientos de personas alrededor del mundo, así como el sacrificio de miles de cabezas de ganado.

 

Se tambalean los mercados

 

Los precios de la carne se derrumbaron tres centavos de dólar por cada libra en el mercado de Chicago, además de que se registraron las caídas en los precios del maíz y el trigo debido a las especulaciones por la reaparición de un caso en Estados Unidos.

 

Personal de la Bolsa en el país vecino informó que si desde el primer momento se hubiera explicado que el animal ya había sido separado de la producción, las pérdidas hubieran sido menores. Con información de Reuters.