De gira por poblaciones de Guerrero afectadas por el temblor del 20 de marzo, el presidente Felipe Calderón dijo estar a favor de que las plazas de profesor sean ocupadas por quienes ganen los concursos de oposición.

 

Calderón escuchó reclamos de habitantes de la Montaña ante la entrega sesgada de la ayuda a los damnificados y la falta de clases por inconformidad de los profesores ante el proceso de evaluación magisterial.

 

Cuando Calderón visitó Huajintepec, una pobladora de la localidad le dijo: “No nos pueden cambiar a los maestros?”. Un niño también tomó el micrófono y repitió la problemática. “Queremos educación porque los niños estamos muy mal, no hay escuelas, por favor”, dijo el niño a Calderón.

 

Ante los señalamientos, el mandatario pidió que los profesores den clases o, si van a dedicarse al activismo, dejen las plazas.

 

Ante el señalamiento de una maestra, quien pidió casas para los adultos mayores, como una de las mayores necesidades de los damnificados, pero recalcó que los niños no reciben clases porque sus profesores están inconformes ante la evaluación al magisterio, Calderón respondió: “totalmente de acuerdo, maestra. Lo que dice es muy importante, hay que concentrarnos en las casas. Me parece que en México tenemos esas contradicciones, como si sobraran niños o si sobraran maestros. Hay escuelas pero los maestros no van, creo que es un gesto de responsabilidad que también los maestros que tienen plaza, tienen que dar clase, y si no pues mejor que suelten la plaza, eso es lo que tenemos que hacer. También creo que las vacantes de maestro tienen que hacerse por concurso”

 

Calderón garantizó “el mayor dinero para que el apoyo sea transparente” y rechazó cualquier tipo de oportunismo o manipulación política en el apoyo a las familias damnificadas.

 

Anunció la puesta en operación de un programa de reconstrucción de viviendas que será, quizá, el más amplio que haya tenido México en mucho tiempo, acción que será apoyada por el gobierno federal hasta el límite de sus posibilidades presupuestarias y reglamentarias.

 

El titular de la Sedesol, Heriberto Félix Guerra, dio a conocer que en los estados de Oaxaca y Guerrero hay 37 mil 500 inmuebles con deterioro de diversas magnitudes, de los cuales cinco mil 900 presentan daño total.