WASHINGTON.- Los presidentes de EU, Barack Obama, y México, Felipe Calderón, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, celebran hoy una cumbre para fortalecer la cooperación en materia de prosperidad económica y seguridad, entre otros asuntos de interés regional.

 

La Cumbre de Líderes de América del Norte servirá para repasar un amplio abanico de temas de cooperación como “el crecimiento económico y la competitividad, seguridad ciudadana, energía y cambio climático”, recordó el viernes a los periodistas un portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.

 

También discutirán el papel de Norteamérica en la región como antesala de la VI Cumbre de las Américas, que se celebrará entre el 14 y 15 de abril en Cartagena (Colombia), “además de otros asuntos globales, económicos, políticos y de seguridad”, agregó.

Earnest no pudo precisar si habría resultados concretos de la cumbre, programada para noviembre pasado en Honolulu (Hawai) pero suspendida tras la muerte en México en un accidente de helicóptero del entonces secretario mexicano de Gobernación, Francisco Blake Mora.

 

Otras fuentes allegadas a la cumbre dijeron que los tres líderes previsiblemente aprovecharán el cónclave para establecer sus prioridades de cara al encuentro del Grupo de los 20 (G-20) en Los Cabos (México), en junio próximo.

 

Earnest dijo no estar seguro de por qué la reunión, que incluirá un almuerzo y una rueda de prensa conjunta, no se celebra en Colombia “al margen” de la Cumbre de las Américas, pero subrayó que Obama valora esta “importante” oportunidad de reunirse con Calderón y Harper.

El encuentro se produce en unos momentos en que los tres países miembros del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) buscan avanzar hacia su integración como bloque comercial.

 

Tan sólo el valor del comercio terrestre dentro del TLCAN en 2011 totalizó la cifra récord de 904 mil millones de dólares, un aumento del 14.3% respecto a 2010 y su tercer gran aumento porcentual anual desde que el pacto entró en vigor en 1994, según el Departamento de Transporte de EU.

 

Para Obama, la cumbre ofrece una oportunidad de reiterar su compromiso con la creación de empleos y la integración de América del Norte, además de que ésta serviría como una especie de acto electoral, de cara a sus esfuerzos por captar el voto hispano en noviembre próximo.

La reunión se llevará a cabo mientras México atraviesa una cruenta lucha contra los carteles del narcotráfico que se ha cobrado la vida de unas 50 mil personas desde diciembre de 2006, cuando Calderón desplegó al ejército contra los narcos.

 

La lucha contra ese flagelo ha dominado la presidencia de Calderón y aunque éste asegura que terminará su sexenio con “tranquilidad de conciencia” y un país mejorado, la espiral de violencia ha mermado el apoyo hacia su partido (de Acción Nacional), ante los comicios presidenciales del próximo 1 de julio.

 

La cumbre da seguimiento a la otrora Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN), que surgió en marzo de 2005 como una propuesta del entonces presidente de EU, George W. Bush, de crear un cinturón de seguridad tras los atentados del 11 de septiembre del 2001.

 

Ahora, el encuentro previsiblemente irá más allá de los temas tradicionales, porque incluirá la cooperación en materia de defensa.