Londres. Reino Unido vendió equipamiento militar valorado en más de un millón de libras (1.2 millones de euros) a Baréin entre julio y septiembre de 2011, durante las revueltas en ese país que hoy cumplen su primer aniversario.

 

Según un informe del Ministerio británico de Empresas, Londres vendió durante este periodo armamento al reino bareiní, entre el que se incluían rifles, artillería, silenciadores para pistolas, mirillas de armas y equipamiento para el entrenamiento de aviones militares.

 

El documento, del que se hace eco hoy el periódico “The Guardian” en su página web, revela que el Reino Unido también vendió equipamiento militar como vehículos de combate y tecnología para misiles aéreos a Arabia Saudí, uno de los principales aliados del régimen de Baréin para sofocar las revueltas.

 

El ministro británico de Empresas, el liberaldemócrata Vincent Cable, admitió la semana pasada en una comisión parlamentaria que el Reino Unido vendía armamento a gobiernos no democráticos y con un “mal historial” en derechos humanos.

 

“Hacemos negocios con gobiernos represivos. No lo podemos desmentir”, dijo Cable en unas declaraciones recogidas por “The Guardian”.

 

Baréin, un pequeño reino en el golfo Pérsico con una mayoría chií del 70 por ciento, ha sido escenario de una serie de protestas contra la minoría suní que gobierna el país, encabezada por el rey Hamad bin Isa al Jalifa.

 

La tensión ha aumentado en la ultima semana, conforme se acercaba el primer aniversario del inicio de las protestas.

 

Durante la jornada de hoy, la capital del país, Manama, ha sido escenario de enfrentamientos entre los opositores al régimen y la policía, que lanzó gases lacrimógenos contra los que intentaron llegar a la rotonda de Lulu (perla en árabe), el epicentro de las protestas del año pasado.

 

Los disturbios de hoy se saldaron con varios manifestantes detenidos, entre ellos cuatro activistas estadounidenses.

 

En los días anteriores, las fuerzas de seguridad bareiníes ya habían empleado gases lacrimógenos, bombas de sonido y balas de goma para disuadir las manifestaciones que se habían convocado en la capital. EFE