Unos tres millones de personas en el mundo podrían quedarse sin empleo este año para alcanzar una cifra de 203 millones. A pesar de los esfuerzos, uno de cada tres trabajadores está desempleado o vive en la pobreza, advirtió el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Juan Somavia.

 

En el informe Tendencias Mundiales del Empleo 2012, prevenir una crisis mayor del empleo, advierte que en un escenario de crecimiento mundial por debajo de 2%, uno de los sectores más afectados serán los jóvenes, quienes tienen tres veces más posibilidades de quedarse sin trabajo.

 

El organismo plantea tres escenarios para la evolución del empleo de cara al futuro. La proyección base muestra tres millones más de desempleados en 2012, para llegar a 206 millones en 2016.

 

La segunda manifiesta que si las tasas de crecimiento mundial disminuyen por debajo de 2%, entonces el desempleo aumentará a 204 millones en este 2012. Finalmente, en un escenario más positivo, que implica una rápida solución de la crisis de la deuda en la zona euro, el desempleo mundial disminuiría en casi un millón de personas en 2012, comparado con el escenario base.

 

El informe sostiene que hoy en día existen 200 millones de desempleados a nivel mundial y que será necesario crear 600 millones de nuevos puestos de trabajo durante la próxima década para absorber el crecimiento anual de la fuerza de trabajo, generar un crecimiento sostenible y mantener la estabilidad social.

 

El informe señala que la incapacidad de las economías para generar trabajo se refleja en que la población en edad de trabajar está desempleada. Esto, aunado a que la población activa cuenta con aproximadamente 29 millones de personas menos que lo previsto en base a las tendencias anteriores a la crisis.

 

El panorama de empleo para los jóvenes es peor, la OIT estima que la tasa mundial de desempleo en este grupo alcanza 12.7% y que los jóvenes tienen tres veces más posibilidades que los adultos de estar desempleados.

 

Las mujeres también se encuentran en el sector más desfavorable. Se calcula que 50.5% tiene un empleo vulnerable, al ser trabajadoras por cuenta propia o laborar con familiares y no recibir por ello una remuneración.