Italia ya no está en vías de terminar como Grecia gracias al ajuste económico recién aprobado por el Parlamento y con el cual han sido puestas en zona segura las cuentas públicas, dijo hoy el primer ministro, Mario Monti.

 

“Nos hemos alejado de Grecia. Hemos apoyado los pies con fuerza para no caer, había muchos buitres en los cielos de Europa pero no caímos”, declaró el primer ministro en la rueda de prensa de fin de año.

 

Insistió en que el país debe aún hacer esfuerzos para alejarse del precipicio, aunque desmintió que vaya a ser aprobado un nuevo ajuste económico.

 

“Italia tiene considerables puntos de fuerza, como la capacidad de comprender de los italianos cuando se les explica lo que hay que hacer”, afirmó.

 

Monti dijo que su gobierno hará todo lo posible para evitar tensiones sociales y que aunque los problemas de los mercados financieros son de alcance europeo, era necesario que Italia iniciará poner orden en sus cuentas públicas.

 

El primer ministro aseguró que sin el ajuste por 30 mil millones de euros aprobado por su gobierno, el país corre el riesgo de caer en una “recesión explosiva”.

 

“Con el plan de ajuste pusimos bajo seguridad estructuralmente las cuentas públicas”, anotó.

 

Pero reconoció que no puede haber consolidación sostenible de las cuentas públicas si el Producto Interno Bruto PIB) no crece de manera “adecuada”.

 

Anunció que en las próximas semanas su ejecutivo propondrá al país una política a favor del crecimiento económico, aunque precisó que la misma no hará “mucho uso” del dinero público, porque “hay poco”.

 

Para Monti no existe una “fase uno” separada de la dos en su plan de saneamiento financiero, porque los principales objetivos, es decir, crecimiento, equidad y consolidación de las cuentas públicas, son los mismos en la fase dos que está por iniciar.

 

Dijo que fueron tomadas medidas para lograr un superávit primario estructural del cinco por ciento en grado de llevar al país al equilibrio presupuestal en 2013 y, por lo tanto, a una reducción de la deuda pública (superior al 120 por ciento del PIB).

 

El jefe de gobierno precisó que la primera fase de su programa de recuperación finalizará el próximo 23 de enero y después se pasará a la reforma del mercado laboral.

 

Indicó que su plan de crecimiento de la economía prevé liberalizaciones y medidas sobre la competencia y el mercado laboral.

 

Precisó que las iniciativas serán decididas en acuerdo con las fuerzas políticas, sociales y sindicales.