Luís Ángeles Vazquez, director general adjunto de Caravanas de la Salud, reconoció que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) considera un probable daño al erario por más de 300 millones de pesos en el programa de Unidades Médicas Móviles y dijo que intentarán solventarlas.

 

 

Tal como lo señaló la Auditoría, el funcionario federal aceptó que no cuentan con las facturas que comprueben un gasto de 372.3 millones de pesos en 28 estados para dicho programa.
Lo anterior porque los “contratos establecen que la forma de comprobar es a través del certificado de gasto, firmado por la unidad ejecutora, en este caso son las Secretarías de Salud.
En una entrevista con 24 HORAS, indicó que transfirieron los recursos y las entidades, sin presentar facturas u otros comprobantes fiscales, acreditaron “las especificaciones de gasto, su erogación, y nosotros lo damos como atendido”.
Por lo cual, “en el momento que hace la revisión la Auditoría, solicita las facturas que amparan ese certificado gasto (pero) en ninguno de los instrumentos jurídicos que se han suscrito se solicita
que se acrediten con facturas este gasto; nosotros le decimos esto a la Auditoría y no lo toma como suficiente”.
Ante ese escenario, “estamos solicitando a los estados las facturas correspondientes que amparan esos certificados de gasto para dejar como solventados al 100% estos puntos que determina la Auditoría Superior de la Federación”.
Para el encargado del programa, “no creemos que existe ningún desfalco, ningún desvío de recursos, puesto que en nuestro poder obran certificados de gasto que amparan los importes que se transfirieron”.
Justificó que a “nosotros nos consta que la unidad ejecutora nos mandó un documento que ampara el gasto que está establecido en ese convenio”.
En el caso de Veracruz, donde la ASF descubrió que 14.1 millones de pesos ni siquiera llegaron al sector salud, el director adjunto de Caravanas de la Salud se limitó a señalar que “es que es un tema interno del estado, en el cual, no nos podemos pronunciar al respecto”.