El vocero del Vaticano Federico Lombardi rechazó que en su mensaje durante la reunión de Obispos el papa Francisco haya enviado un regaño al clero mexicano.

 

Durante la reunión que sostuvo con los obispos en la Catedral, el Papa pidió que no se dejen corromper, se aleje de la tentación del poder  y se abra a la transparencia. Pidió que no pierdan el tiempo en habladurías, en los “vanos proyectos de carrera” y en los “infecundos clubes de intereses y consorterías” y que no se dejen seducir por los acuerdos debajo de la mesa; no pongan su confianza en los ‘carros y caballos’ de los faraones actuales”.

 

“A un maestro espiritual como es el Papa, es siempre algo normal porque es una parte esencial de la vida cristiana es la conversión continua, no podemos jamás pensar en ser perfectos (…) la Asamblea con obispos mexicanos es un gran espacio por mejorar, por empeñarse en la contribución a la solución de los grandes problemas de la sociedad mexicana. Es un mensaje de responsabilidad con todos”, señaló el vocero del Vaticano.

 

Sobre el momento durante la oración en solitario que hizo el Papa frente a la imagen de la virgen de Guadalupe, en el cual se desvaneció durante una fracción de segundo, y la evidentemente cansada imagen que mostró el líder de la Iglesia Católica en las últimas horas de su recorrido, Lombardi señaló que Francisco tiene problemas de movilidad y fatiga, por lo cual ha tomado fisioterapia. Esta situación es normal a su edad, señaló, pues tiene cerca de 80 años de edad.

 

Virgen, principal motivo de buena relación entre México y Vaticano

 

El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, hizo una recapitulación del primer día de la gira pastoral del Papa Francisco, con su encuentro con el presidente Enrique Peña Nieto, su discurso a los obispos del país, la misa en la Basílica y los 28 minutos que estuvo frente a la Virgen de Guadalupe.

 

Aseguró que el gobierno mexicano puede contar con la ayuda de la Iglesia Católica que siempre ha estado a su lado, esto al destacar el gran recibimiento que tuvo el papa Francisco por parte del presidente Enrique Peña Nieto.

 

Afirmó que el recibimiento del Santo Padre en Palacio Nacional muestra la buena relación entre México y el Vaticano como naciones, enfatizando que la Virgen de Guadalupe es el principal motivo de unión.

 

“Este gran amor del Papa y la iglesia por el pueblo mexicano es el fundamento de la positiva relación con las organizaciones del Estado Mexicano, por trabajar por el bien de todos” afirmó.

 

Recordó que el pontífice pidió a los obispos que no se cansen y contribuyan en la igualdad de su pueblo, la integración de sus diversidades, motivar a la nación a no contentarse con menos de cuanto se espera del modo mexicano de habitar el mundo.

 

Señaló que el Papa continuará hablando de los problemas que enfrenta México como el respeto a los pueblos indígenas y los migrantes.