Rafael Nadal es una de las figuras más representativas del tenis moderno. El múltiple campeón de los torneos más prestigiosos del deporte debe estar acostumbrado a que su nombre sea un referente de las canchas. Hasta hoy.

 

Durante su participación en el Masters 1000 de París, un guardia del certamen le solicitó cu acreditación para permitirle el acceso a las instalaciones.

 

 

El número 1 del mundo se sorprendió, principalmente porque no contaba con la credencial necesaria. Al informarle al vigilante, este le preguntó su nombre. “Rafael Nadal” respondió con toda tranquilidad y el guardia simplemente se retiró para permitirle seguir su camino.

 

Aunque solo sea una anécdota, no deja de llamar la atención que uno de los máximos exponentes del tenis de los últimos tiempos debiera identificarse durante un torneo de la disciplina, aún con todo un equipo de televisión siguiéndole los pasos.

 

Eventualmente Nadal debería retirarse del torneo debido a problemas con la rodilla.

 

 

 

caem