ASUNCIÓN. El papa Francisco destituyó al obispo de la localidad paraguaya de Ciudad del Este, Rogelio Livieres, debido a irregularidades detectadas en el seminario y otros motivos, según anunció este jueves el nuncio apostólico en Asunción, Eliseo Ariotti.

 

En la sede eclesial hasta ahora a cargo de Livieres figura como sacerdote, desde hace nueve años, el argentino Carlos Urrutigoity, acusado de abusos sexuales en 2002 por un estudiante de la Academia Saint Gregory, en el estado de Pensilvania, en Estados Unidos.

 

En junio pasado, el arzobispo de Asunción, Pastor Cuquejo, sugirió reabrir una investigación para averiguar si son ciertas esas acusaciones, a lo que respondió de forma virulenta Livieres, que le llamó “homosexual” en un acto público y en presencia de la prensa.

 

El papa había pedido a Livieres que renunciara, pero ante su negativa ha procedido a cesarlo, según una declaración oficial que leyó Ariotti en una rueda de prensa.

 

Livieres, que se encuentra actualmente en Roma, podrá seguir con la celebración de sacramentos, como la eucaristía, pero solo en privado, detalló.

 

La decisión llega después de una visita apostólica realizada el pasado julio en la que dos enviados del papa analizaron la situación en la diócesis de Ciudad del Este.

 

En ese momento, se entrevistaron con grupos laicos y religiosos y constataron que había “descontento”, según Ariotti, que no entró en detalles sobre las “irregularidades” detectadas en el seminario.

 

“El papa evaluó todo en un análisis cuidadoso, riguroso”, aseveró Ariotti.

 

A cargo de la diócesis queda el obispo de Villarica, Ricardo Valenzuela, como administrador apostólico.

 

Este obispo tendrá que decidir si el sacerdote argentino Urrutigoity se queda en Ciudad del Este, explicó Ariotti.

MG