BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) mantiene la perspectiva de concluir las negociaciones de modernización de su acuerdo bilateral de libre comercio con México antes de 2018, pese a temas pendientes, como la importación europea de materias primas, dijo hoy una fuente de la Comisión Europea (CE).

 

“Estamos plenamente comprometidos y pensamos que nuestros colegas (mexicanos) igualmente”, aseguró la fuente al tiempo que agregó que la UE no descarta la posibilidad de convocar a una ronda de negociación extraordinaria en diciembre para hacerlo posible.

 

Entre los temas pendientes que han obstaculizado la conclusión de las negociaciones, la fuente europea se refirió a las restricciones de México a las exportaciones de petróleo y gas.

 

“Creemos que es la hora de abolir esas restricciones y ese es uno de nuestros objetivos clave”, dijo, al tiempo que elogió la apertura ya proporcionada por la reforma energética en el país latinoamericano.

 

Los europeos saben que la exigencia recae sobre un sector sensible para México, pero señalan que, para un importador neto de materias primas, como la UE, es esencial garantizar la seguridad del suministro.

 

No sólo a México se está pidiendo suprimir las restricciones a las exportaciones de energía y materias primas, sino también al Mercosur (bloque sudamericano que reúne a Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) y a todos los demás países con los que se negocian acuerdos bilaterales.

 

“Es algo que queremos incluir en todos nuestros acuerdos”, afirmó la fuente europea.

 

Los negociadores de la UE pretenden agregar un capítulo específico sobre energía y materias primas en la modernización del pacto que tiene en vigor con México desde 2000.

 

Otro punto de fricción es el acceso a los contratos públicos que México está dispuesto a ofrecer a las empresas europeas.

 

En la última ronda de negociación, celebrada en Bruselas, a finales de septiembre, el país se mostró “un poco reacio” a aceptar la participación extranjera en licitaciones a nivel nacional, como quiere la UE incluir en todos los acuerdos comerciales que tiene o negocia en América Latina, explicó la fuente.

 

El sistema de protección de inversiones a ser adoptado por los dos socios en el nuevo acuerdo tampoco ha logrado consenso.

 

México sugiere aplicar el modelo de resolución de litigios existente en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero la UE busca un mecanismo “más claro”.

 

Por otra parte, la fuente de la CE destacó importantes avances en el área de protección de indicaciones geográficas, gracias a la comprensión de los negociadores mexicanos de la importancia que tiene el tema para los europeos.

 

No obstante, el capítulo no está cerrado y la UE se preocupa por la influencia que podrían tener sobre la posición mexicana las empresas estadunidenses establecidas en el país.

 

México ha sometido a la UE un listado de 300 denominaciones que pretende proteger y algunos de ellos podrían ser conflictivos con denominaciones europeas.

 

“México está cerca de un país (Estados Unidos) que no es nuestro mayor aliado en protección de las indicaciones geográficas y hay empresas estadunidenses instaladas en México que tienen, o afirman tener, denominación geográfica”, notó.

 

Junto con la protección de las indicaciones geográficas, otra prioridad de la CE es lograr mayor acceso a los 125 millones de consumidores para productos en los que las exportaciones europeas sobresalen, como carne de cerdo y frutas del bosque.

 

En contrapartida, el bloque promete presentar una propuesta “atractiva” para México en materia de banano y azúcar durante la próxima ronda de negociación, en noviembre.

 

“En esas áreas, hay margen para atender las expectativas de los mexicanos, desde que lo calibramos bien con las sensibilidades en la UE”, afirmó el funcionario europeo.

 

DCA