Joseph Liberman, de 75 años de edad, veterano y experimentado político de Stamford, Connecticut, ex candidato a la Vicepresidencia con Al Gore, encabeza la lista de candidatos a suceder a James Comey, en la dirección del FBI.

 

El presidente Donald Trump lo confirmó en la Casa Blanca durante una conferencia de prensa con su homólogo de Colombia, Juan Manuel Santos, y luego que Sean Spicer, su vocero, lo había adelantado.

 

Trump, acompañado de Jeff Sessions, Procurador de Justicia de EU, se entrevistó con Liberman, el miércoles pasado; y, de acuerdo con fuentes de la mansión presidencial, “encontró grandes coincidencias y puntos de acuerdo”.

 

John Cornyn, actual líder de la mayoría Republicana en el Senado, era el favorito de Trump, pero el Senador por Texas , que fue fiscal Federal en Texas y miembro de la Suprema Corte de Justicia de su estado, declinó.

 

Entre otros posibles candidatos se mencionó a Merrill Garland, quien fue nominado del ex Presidente Barack Obama para la Suprema Corte de Justicia; Andrew McCabe, director en funciones; Frank Keating, Gobernador de Oklahoma; Richard McFeely, ex funcionario del FBI; Mike Rogers, ex congresista; así como el congresista Trey Gawdy y hasta Rudy Giuliani.

 

Liberman alcanzó fama al convertirse en candidato demócrata a la vicepresidencia, con Al Gore en la elección del 2000.

 

Pero Liberman no es visto con buenos ojos por los demócratas, porque en 2006, luego de perder la elección primaria en su partido para reelegirse como Senador, se postuló y ganó como independiente.

 

En 2007, cruzó la línea partidista y se solidarizó con su compañero John Mc Cain, hablando a favor de Mc Cain en la Convención Nacional Republicana, durante la Campaña Presidencial de 2008, dando la espalda a Barack Obama, entonces candidato demócrata y por si fuera poco, porque tras dejar el Senado, se incorporó a la firma Kasowitz, Benson, Torres y Friedman LLP que ha representado a Donald Trump en juicios pasados.

 

Liberman, que es un judío ortodoxo, estudio en la Universidad de Yale; al graduarse sirvió como Senador estatal y Procurador general en Connecticut y se postuló en 1988 y fue electo Senador Federal, cargo en el que duró casi 20 años.

 

El nombramiento del nuevo director del FBI, puesto que ocupara casi 10 años James Comey, quien fue despedido por Donald Trump, ha acaparado la atención por las expectativas que existen en torno a la continuación de la investigación del FBI, sobre la injerencia Rusa en la Elección Presidencial de 2016 y la posible colusión del comité de campana de Trump con funcionarios rusos, de lo que Trump antes hizo alarde y ahora, cuando se investigan las declaraciones que ha hecho, califica el hecho como “la mayor cacería de brujas que se haya realizado a un político, en la historia de Estados Unidos”.

 

Una vez que Donald Triump oficialice su nombramiento, el director del FBI debe testificar en audiencias del Comité Judicial del Senado, para su confirmación, primero en el Comité y luego en el pleno de la Cámara de Representantes, donde podría haber oposición demócrata.

 

aarl