El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo hoy que el exdirector del FBI James Comey le aseguró que él no estaba siendo investigado en las pesquisas iniciadas por esa agencia sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones de noviembre pasado.

 

En extractos adelantados de una entrevista con la cadena NBC, Trump comentó que Comey, a quien despidió de manera fulminante este martes, le dijo hasta en tres ocasiones, una en persona y dos por teléfono, cuando le preguntó directamente por el tema que él no estaba bajo investigación.

 

“Dije (a Comey): es posible que me deje saber ¿estoy bajo investigación?”, relató Trump en la entrevista, que será emitida en su totalidad esta noche.

 

La respuesta de Comey, de acuerdo con Trump, fue clara: “Usted no está bajo investigación”.

 

“Yo sé que no estoy bajo investigación, yo personalmente, no estoy hablando de las campañas”, insistió el mandatario.

 

Por otro lado, Trump defendió su decisión de despedir a Comey y precisó que lo iba a hacer “independientemente de la recomendación” que recibió de su fiscal general, Jeff Sessions, y del subfiscal general, Rod Rosenstein.

 

Rosenstein, el “número dos” del Departamento de Justicia, se encargó de elaborar un memorando de tres páginas para explicar las razones del despido del director del FBI, un documento que, según la Casa Blanca, fue lo que llevó a Trump a concluir que Comey debía ser destituido “con efecto inmediato”.

 

El subfiscal general amenazó incluso con dimitir después de la versión de la Casa Blanca acerca de que fue él quien impulsó la salida de Comey, según dijeron funcionarios gubernamentales a medios estadounidenses.

 

En la entrevista con NBC, Trump contradijo totalmente la versión de la Casa Blanca sobre la destitución de Comey. “Lo iba a despedir con independencia de la recomendación”, aseguró.

 

Comey “es un fanfarrón” y el Buró Federal de Investigaciones (FBI) era “un descontrol” desde hace tiempo, según Trump.

 

La razón oficial del despido de Comey ofrecida por la Casa Blanca es la mala gestión que hizo de la investigación sobre el uso que hizo la demócrata Hillary Clinton, rival de Trump en las elecciones de noviembre, de servidores de correo privados para comunicaciones oficiales cuando era secretaria de Estado (2009-2013).

 

El despido de Comey ha generado una gran controversia, dado que era el encargado de liderar la investigación sobre la supuesta interferencia de Moscú en las elecciones de noviembre y la relación entre funcionarios rusos y miembros de la campaña electoral de Trump.

 

JMS