NUEVA YORK. Fue Donald Trump el responsable de la buena racha en Wall Street que llevó al mercado a niveles récord, y ha sido él mismo el culpable de la caída que sufrieron este lunes los mercados bursátiles de Nueva York, después de la orden emitida el viernes para vetar temporalmente la entrada de refugiados y ciudadanos de siete países de mayoría musulmana.

 
En la peor sesión de Wall Street en lo que va del año, el Dow Jones de Industriales, el principal indicador del mercado, llegó a perder 223 puntos durante la sesión y acabó con un descenso de 0.61%, con una caída que pudo ser peor si no hubiera sido por el pequeño rebote que hubo en la última media hora de sesiones.

 
No le fue bien a una serie de empresas ligadas a esta decisión de Trump, algunas coincidiendo con declaraciones de sus directivos criticando la decisión de Trump y otras porque se ven directamente afectadas por la medida.
Por ejemplo, Goldman Sachs, que destacó por el rechazo a la orden de Trump, perdió 1.29%, Microsoft cedió 0.99% y Alphabet, la matriz de Google, cayó 2.51%.

 
Peor aún les fue a las principales compañías aéreas del país, que se vieron arrastradas por un problema técnico que sufrió durante el fin de semana Delta y que forzó a la cancelación de unos 300 vuelos, algo que hizo notar el mismo Trump.

 
Pero el temor no ha alcanzado sólo a Wall Street, los negocios en estados fronterizos de EU han comenzado a sentir el efecto de las propuestas migratorias y comerciales de Donald Trump.

 
Nuestras ventas cayeron alrededor de 20%. Se notó la falta de compradores mexicanos este fin de semana “, dijo a la agencia EFE, Robert Geller, gerente comercial de una cadena de tiendas en Tucson (Arizona).

 
Después de que el republicano firmó a la semana pasada una orden ejecutiva para construir un muro en la frontera con México y se hablara de un posible arancel de 20% sobre los productos de este país, se inició una campaña en las redes sociales para que los consumidores dejen de cruzar la frontera a hacer sus compras en EU.

 
Por su parte, la Asociación de Negocios de Texas (TAB, por sus siglas en inglés) dijo que un impuesto a las importaciones mexicanas sería malo para Texas.

 
“El principal socio comercial de Texas es México, e imponer un impuesto de 20% a las importaciones mexicanas para financiar un muro fronterizo dañaría la economía de Texas”, dijo Chris Wallace, presidente del grupo, en una declaración escrita.

 
En tanto, el presidente de la Asociación de Minoristas de Texas, George Kelemen, declaró que “los minoristas hemos dejado en claro nuestra oposición a cualquier tipo de impuesto a la frontera, ya sea la idea del presidente o parte de la propuesta de reforma tributaria en el capitolio”.