WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, negó que exista “caos” en la Casa Blanca tras la renovación de su equipo más cercano de colaboradores, que hoy se completó con el juramento como nuevo jefe de gabinete del general John Kelly, de quien el mandatario destacó que hará “un trabajo fantástico”.

 

Kelly “hará un trabajo espectacular, no tengo dudas, como jefe de gabinete”, subrayó Trump en el Despacho Oval en la ceremonia de jura del cargo del general y exsecretario de Seguridad Nacional.

 

Trump enfatizó en esa ceremonia y en una posterior reunión con los miembros de su gabinete, la labor “milagrosa” de Departamento de Seguridad Nacionalen sus poco más de seis meses al frente del Departamento de Seguridad Nacional (Departamento de Seguridad Nacional), fundamentalmente en la reducción de la inmigración a través de la frontera con México.

 

Según Trump, la “interrupción” de esa inmigración ha sido de casi un 80 % e “incluso” el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, lo llamó para decirle que “muy pocas personas” lo intentan “porque saben que no van a atravesar” la frontera.

 

“Así que solo quiero felicitarlo (a Kelly) por el gran trabajo que ha hecho con la Seguridad Nacional y no tengo ninguna duda de que será un absolutamente magnífico jefe de gabinete”, insistió el mandatario.

 

Kelly es el primer general que asume como jefe de gabinete de la Casa Blanca desde Alexander Haig en el Gobierno del expresidente Richard Nixon (1969-1974).

 

El anuncio del nombramiento de Kelly el pasado viernes en sustitución de Reince Priebus culminó una semana caótica en la Casa Blanca marcada por la llegada del polémico Anthony Scaramucci como nuevo director de comunicaciones y el adiós de Sean Spicer como portavoz.

 

No obstante, Trump negó hoy en un tuit que haya “caos” en la Casa Blanca y subrayó, entre otros logros, que hay una “frontera segura”, los salarios están “creciendo” y el desempleo, del 4,4 %, es “el menor en 17 años”.

 

“Tenemos un montón de récords. Tenemos el mercado bursátil más elevado de la historia, los mejores indicadores económicos en años”, insistió Trump durante el juramento de Kelly.

 

“El país vive un momento optimista”, agregó el magnate.

 

En la reunión con su gabinete, Trump aseguró, además, que la economía estadounidense va “increíblemente bien” y recordó el dato, conocido la semana pasada del ritmo anual de crecimiento de 2,6 % registrado en el segundo trimestre.

 

“Tenemos algunas situaciones interesantes de las que nos encargaremos: Corea del Norte, Oriente Medio, muchos problemas que heredamos de anteriores gobiernos. Pero nos encargaremos de ellas“, prometió el presidente.

 

Al ser preguntando específicamente por el último lanzamiento de un misil intercontinental por parte del régimen de Pyongyang, Trump se limitó a decir: “Nos encargaremos de Corea del Norte”.

 

Con el aterrizaje de Kelly y Scaramucci, un financiero de Wall Street, en la Casa Blanca, en el círculo más cercano a Trump son ahora mayoría aplastante figuras ajenas al aparato del Partido Republicano, como el estratega jefe, Steve Bannon; el matrimonio formado por Jared Kushner e Ivanka Trump, o el principal asesor económico, el exbanquero Gary Cohn.

 

Sin embargo, Scaramucci comentó durante el fin de semana que quiere construir una relación “incluso más fuerte” que la actual con el secretariado del Partido Republicano.

 

Sin experiencia previa en comunicación política, Scaramucci parece haberse ganado muy rápido la confianza de Trump y el único mando al que está atado es el propio presidente, con independencia de la llegada de Kelly como nuevo jefe de gabinete.

 

El reto fundamental de Kelly será poner orden en una Casa Blanca donde las guerras internas por acceder a Trump e influir en él y las filtraciones constantes de información han sido la tónica desde el primer día de la Presidencia del magnate.

 

dca