SAN FRANCISCO. El tiroteo del pasado viernes 24 octubre en una secundaria en el que murieron dos alumnos, entre ellos el presunto autor de los disparos, y otros cuatro resultaron heridos ha reabierto el debate sobre las armas de fuego en Estados Unidos  a sólo una semana de las elecciones legislativas.

 

Precisamente el estado de Washington, donde tuvieron lugar los hechos, votará dos medidas legislativas destinadas a restringir o garantizar el derecho a poseer y portar armas en los comicios legislativos del próximo 4 de noviembre, además de elegir a sus representantes para el Congreso.

 

Pocas horas después de que se produjese el fatídico tiroteo en el instituto Pilchuck de Marysville (Washington), varias organizaciones partidarias de restringir este derecho amparado por la Constitución de EU vincularon el suceso a la “facilidad” para obtener un arma de fuego y pidieron a los votantes que apoyen las citadas medidas.

 

“Incidentes como este son ejemplos de que la violencia por armas de fuego es demasiado frecuente en nuestro estado. Está en nuestras manos trabajar juntos para reducir la violencia por armas de fuego”, indicó en un comunicado la Alianza de Washington para la Responsabilidad con las Armas.

 

Este grupo es uno de los principales promotores de la Iniciativa 594, que de ser aprobada por los votantes el 4 de noviembre, aumentará los controles de verificación de antecedentes para que cualquier ciudadano pueda comprar una pistola.

 

Los mensajes de los grupos contrarios a las armas rápidamente encontraron oposición por parte de los partidarios de este derecho constitucional, quienes lamentaron que el tiroteo mortal en el instituto se estuviese “utilizando con fines políticos”.

 

“Este deplorable incidente no se hubiese evitado con la Iniciativa 594 porque el autor de los disparos tenía menos de la edad permitida para comprar un arma legalmente. Intentar usar esta tragedia para aprobar la I-594 demuestra cuán lejos está dispuesto a llegar el lobby anti-armas”, indicó el presidente del grupo Comité Ciudadano por el Derecho a Poseer y Portar Armas, Alan Gottlieb.

 

Por su parte, varios medios estadunidenses, tanto locales como nacionales, dedicaron editoriales a tratar este asunto.

 

“Debemos reconsiderar cuestiones como la seguridad en las escuelas, la prevención del acoso escolar o la facilidad que existe en nuestra nación para acceder a las armas de fuego”, planteó el diario de referencia de la zona donde se produjo el tiroteo, el Seattle Times.

 

No es normal que en una nación civilizada haya más de 30 mil muertos al año por armas de fuego. No es normal esperar que los educadores y padres tengan que tener planes para estar listos en caso de tiroteo en su escuela”, criticó en una columna en el sitio web de CNN un ex asesor del expresidente Bill Clinton, Eric Liu.

 

“No es normal, en una nación civilizada, decir que la mejor solución para la violencia por armas es que más personas tengan acceso a las armas”, concluyó Liu, residente en Seattle.
Mientras, los hospitales en los que están ingresados los cuatro estudiantes que el pasado viernes resultaron heridos en el tiroteo en el instituto Pilchuck informaron hoy que tres de ellos siguen en estado crítico, mientras que el cuarto está “grave”.

 

Un estudiante del instituto disparó mortalmente contra una alumna e hirió a otros cuatro estudiantes (dos mujeres y dos hombres) mientras desayunaban en la cafetería del centro escolar, tras lo cual se suicidó.

 

Varios testigos del tiroteo indicaron a los medios de comunicación que el presunto autor de los disparos fue el alumno de primer año (unos 14 años) del centro Jaylen Fryberg, y apuntaron a un desengaño amoroso como el motivo que le llevó a protagonizar el tiroteo.

 

GH