TIJUANA. La crisis migratoria de haitianos ha golpeado económicamente al Ayuntamiento de Tijuana, instancia que en los últimos cinco meses tuvo que destinar (de manera extraordinaria) 1.2 millones de pesos para la manutención de los más de 14 mil 400 haitianos que han pasado por la ciudad desde finales de mayo, explicó Rosario Lozada Romero, directora municipal de Atención al Migrante.

 

“El Ayuntamiento de Tijuana se ha hecho cargo, en su totalidad, de todo lo que eso ha conllevado. Primero, en julio aportó 600 mil pesos a los cincos albergues que estaban operando para atender a la primer población (de migrantes), pero tuvimos la necesidad de abrir otros espacios. Por eso, hace unas semanas, se aportaron otros 600 mil pesos, por lo que ya van 1.2 millones de pesos”, explicó la funcionaria.

 

Ropa, calzado, comida, medicinas y cobijas son algunas de las cosas en las que se invierte este dinero.

 

La Dirección Municipal de Atención al Migrante de Tijuana es nueva, pues comenzó operaciones en abril pasado, por lo que para este año no tenía recursos asignados, pero debido a la llegada de miles de haitianos provenientes de Brasil (cuyo objetivo es obtener asilo en Estados Unidos) se tuvo que destinar recursos para la atención de esta problemática.

 

Tradicionalmente, operan cinco albergues en Tijuana, los cuales atendían a 300 personas diarias en promedio; pero actualmente, según cifras del ayuntamiento, hay cuatro mil 126 migrantes de todas las nacionalidades en la ciudad, de ellos más de tres mil serían haitianos.

 

“Se creó un comité de ayuda humanitaria para ver las necesidades de 15 albergues que tenemos actualmente, en donde se encuentran cuatro mil 126 personas”, añadió Lozada Romero.

 

Aunque Tijuana es una ciudad que apoya a los migrantes, la oleada de visitantes del Caribe es un reto para las autoridades. Lozada Romero explicó que, por ejemplo, en la zona centro (donde pernoctan la mayoría de los haitianos) los servicios de basura y seguridad aumentaron; además, aseguró que los gobiernos estatal y federal consideran que cerca de cinco mil personas en albergues son pocas, por lo que no lo ven como una emergencia.

 

 

Tiempo en contra

 

El tiempo es el otro problema que enfrentan tanto las autoridades municipales como los migrantes, es el tiempo. Por ejemplo, ayer el Ayuntamiento gestionó una docena de citas con el Consulado de Estados Unidos para el 11 de diciembre, es decir, faltan siete semanas, días en los que el que esas personas van a seguir requiriendo apoyo.

 

A eso hay que sumarle que la actual gestión municipal terminará el 30 de noviembre, por lo que no se sabe si habrá continuidad en este programa de atención al migrante.

 
“El primer grupo llegó el 26 de mayo a la Garita de San Isidro. Eran  poco más de 70 personas. Al otro día eran 300 y después 500 y después mil 700…”, afirmó Rosario Lozada Romero, directora municipal de Atención al Migrante de Tijuana.