MONTERREY. Triunfo sufrido, agónico y que se dio en los minutos finales del partido, lo que explica la reacción de Ricardo Ferretti que dio un profundo respiro en cuanto el árbitro finalizó el compromiso. Tigres está en las Semifinales de la Copa Libertadores de América, después de imponerse 2-0 (2-1 en el global) al Emelec, en el choque de Vuelta de cuartos de final.

 

Un partido complicado, duro, con un equipo visitante que se cerró bien, que no dio espacios, por ello los felinos tuvieron que redoblar esfuerzos para conseguir el pase a la siguiente ronda.

 

Las cosas pintaban bien para los regios al inicio de la primera parte porque cayó la victoria parcial apenas a los cinco minutos de acción, tras un disparo de Rafael Sobis que se incrustó cerca del palo izquierdo. El arquero no hizo un buen recorrido y la pifia le costó el tanto de la igualada en el global.

 

El equipo mexicano tuvo para conseguir un par de tantos más, primero con un disparo de Enrique Esqueda que alcanzó a desviar el cancerbero, y después con un remate de cabeza de la Palmera Rivas que se fue a un costado, en un grave error del defensa que estaba sólo a la altura del manchón penal.

 

En el complemento, no cambiaron las cosas. Emelec retrasó filas, no permitió que Tigres hiciera su futbol y fue, en una genialidad de Jorge Torres Nilo, que cayó el 2-0 definitivo, después de que el seleccionado nacional se escapó por la banda izquierda y sirvió, en bandeja de plata, a Rivas quien remató de cabeza y clavó la estaca al minuto 79.

 

Los ecuatorianos intentaron reaccionar, se adelantaron, hicieron cambios, pero nada funcionó. Tigres le devolvió la cortesía, se defendió bien en la recta final y logró el pase a las Semifinales. Por octava ocasión un equipo mexicano hace ruido en Copa Libertadores.