Texas manifestó hoy su rechazo a las recomendaciones del gobierno federal para adecuar las escuelas públicas a las necesidades de los estudiantes transgénero y dijo estar dispuesto a llevar el caso ante las cortes.

 

“Si ese es el camino, creo que nos van a ver en las cortes”, señaló el procurador estatal Ken Paxton sobre la posibilidad de que Texas pierda millones de dólares en fondos federales si se niega a aplicar las recomendaciones anunciadas la víspera por la administración Obama.

 

Paxton acusó al gobierno del presidente Barack Obama de ofrecer una nueva interpretación del estatuto y de imponer su voluntad sobre los estadunidenses con una “ley inconstitucional”.

 

“No hay nada en los estatutos que le den autoridad al presidente para producir una nueva ley. Vamos a pelear esto de principio a fin. No creemos que él tenga la autoridad para hacerlo”, precisó el procurador en entrevista con la televisora Fox.

 

De cumplirse la advertencia, Texas ampliaría el rango de la pelea legal que mantiene con la administración Obama en el frente migratorio, a la que antes sumó su demanda contra la implementación de la ley de Salud.

 

El gobierno federal dio a conocer la víspera una serie de recomendaciones para que las escuelas públicas de Estados Unidos faciliten a estudiantes transgénero el uso de sus instalaciones, por ejemplo los baños, a partir del género con que estos se identifican.

 

Aunque no son obligatorias, las medidas afectarían a 16 mil 500 escuelas y siete mil colegios universitarios del país que reciben fondos de asistencia del gobierno federal, incluyendo aquellas del sistema de educación pública de Texas.

 

Este año Texas recibirá del gobierno federal casi 10 mil millones de dólares en asistencia federal, que podría perder si se niega a observar las nuevas directrices.

 

Otros estados que han expresado una posición similar a Texas, entre ellos Arkansas, han manifestado también su intención de acudir a las cortes para evadir la instrucción del gobierno federal.

 

La directriz fue anunciada por los departamentos de Justicia y Educación al amparo del artículo IX de la Ley de Educación de 1972, que prohíbe la discriminación en la educación a partir de raza, religión o género.

 

La administración Obama explicó que esta acción busca asegurar que los estudiantes transgénero disfruten de un medio ambiente escolar que no discrimine.

 

Paxton insistió, sin embargo, en que el estatuto que el gobierno federal pretende hacer valer no existe debido a la ausencia del término transgénero en dicha ley, la cual, insistió, hace referencia sólo al hombre y la mujer.

 

“Esto tiene que llegar al Congreso, y si ellos deciden que quieren ocuparse de ello, tendrán que hacerlo”, sostuvo el procurador texano, quien aclaró que sus decisiones estarán determinadas por el curso que sigan las autoridades educativas del estado.