NAIROBI. Desde Kenia, al inicio de una gira de seis días que lo llevará también a Uganda y a la convulsa República Centroafricana, el papa llamó a luchar de manera más resuelta contra la pobreza y la desigualdad. La pobreza y la falta de perspectivas son el medio de cultivo para la violencia, los conflictos y el terrorismo, advirtió Francisco tras su arribo en la capital Nairobi.

 

En su primera y única comparecencia pública ayer, tras una rápida ceremonia de bienvenida y un breve encuentro con el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, Francisco también abordó la protección del medio ambiente, otro de los ejes centrales de su pontificado. “La grave crisis del medio ambiente que enfrenta nuestro planeta requiere una sensibilidad cada vez mayor para la relación entre el hombre y la naturaleza”, dijo. “Tenemos la responsabilidad de entregar a las próximas generaciones la belleza de la naturaleza en su totalidad”, agregó.

 

El jefe de la Iglesia católica, de 78 años, se reunirá hoy con representantes de otras religiones, entre ellos protestantes, anglicanos, musulmanes y miembros de religiones tradicionales africanas. Posteriormente oficiará una misa en el recinto de la Universidad de Nairobi. Francisco, a también tiene prevista una visita a la sede central del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en Nairobi, donde el pontífice dará un importante discurso poco antes de que se celebre la cumbre del clima a partir del lunes próximo en París.

 

Los reparos vinculados con eventuales problemas de seguridad en la República Centroafricana fueron desestimados por el propio Papa, quien bromeó que solo le teme a los mosquitos, en un país donde existe un alto índice de malaria: “Hay gente buena y mala. Para ser sincero, lo único que me preocupa son los mosquitos”.

 

Se barajó que sus traslados se efectuaran en un vehículo todoterreno blindado y de cristales opacos, pero el pontífice también lo rechazó.

 

La convulsa nación, una de las más pobres del mundo, se ve envuelta desde 2013 en una grave ola de violencia entre rebeldes musulmanes y milicias cristianas.