El gobierno está a punto de explotar.

 

Siente, con pruebas, un boicot de las fuerzas políticas de oposición para frenar reformas fundamentales de seguridad pública y en especial por el llamado Mando Único.

 

Por ello, informamos aquí ayer, el presidente Enrique Peña planteó al presidente de la Cámara de Diputados y del Congreso de la Unión, Jesús Zambrano, impulsar la negociación.

 

Esto supone, naturalmente, aprobar una iniciativa distinta a la enviada por el Poder Ejecutivo al Legislativo para atacar a la alta delincuencia e intentar resolver la porosidad de las policías estatales y municipales.

 

¿Por qué la desesperación?

 

Obvio: porque se va el sexenio y ya no queda mayor margen a fin de instrumentar acciones promisorias para coordinar a las distintas corporaciones del país, del ámbito federal al estatal y municipal.

 

De poco ha servido el gran respaldo de la Conago, cuyo ex presidente Eruviel Ávila Villegas –ayer entregó el puesto a Gabino Cué– intentó dar el gran avance.

 
Como rémoras están el PAN y el PRD, pues sus dirigentes Ricardo Anaya y Agustín Basave apuestan al fracaso del gobierno, metidos como están en los pleitos internos.

 

De eso hablaremos mañana.

 

La última oportunidad en seguridad

 

Hoy está en juego la seguridad de la República y, quién lo duda, el Estado de derecho.

 

Usted tuvo un avance de la desesperación presidencial, confirmada ayer mismo por el propio Enrique Peña Nieto durante el traspaso de la Conago de Eruviel Ávila Villegas a Gabino Cué.

 

Dice la información de Notimex:

 

“El presidente Enrique Peña Nieto llamó a acelerar la aplicación de políticas en materias de seguridad y justicia, como la creación del Mando Único estatal, la aplicación del sistema de justicia penal y la modernización del sistema penitenciario”.

 

El mismo despacho habla de un año sin avances y a continuación el Presidente avaló lo señalado aquí ayer en este espacio:

 

“No significa que el dictamen tenga que aprobarse en sus términos pero que se debata ya, porque no podemos permanecer por más tiempo pasivos y a la espera de que pase el tiempo y no se resuelva este tema, que sin duda dará mayor solidez al Estado mexicano, y permitirá dar más tranquilidad y paz a las familias.

 

“En el Teatro Morelos de la capital mexiquense, el Ejecutivo federal también urgió a las entidades federativas que todavía no avanzan en la aplicación del nuevo sistema de justicia penal, a acelerar el paso, pues la entrada en vigor de este sistema, establecido para junio de este año ‘no admitirá prórroga alguna’”.

 

Quién sabe si sea la última oportunidad, pero en las alturas del poder así lo consideran y por ello la instrucción al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, es apostar al peso del Ejecutivo para alcanzar esta ansiada coordinación.

 

¿Cómo?

 

Como lo decida el Poder Legislativo, pero ya.

 

Y la última esperanza del PRI en Quintana Roo

 

1.- El daño al priismo en Quintana Roo está hecho.

 

Se fue Carlos Joaquín mientras el PRI se hace bolas sobre el abanderado para sustituir a Roberto Borge, enemigo personal de aquél.

 

Queda todavía una ventanita de esperanza.

 

La diputada Marybel Villegas trae las tendencias para la alcaldía de Benito Juárez (Cancún) y por sí misma puede decidir la sucesión en esa entidad del Caribe.

 

Aspira a ser la abandera de la alianza PRI-PVEM pero, ¡oh circunstancia!, analiza la invitación de la alianza PAN-PRD para secundar a Joaquín y enfrentar al PRI, donde ahora milita.

 

Es una decisión crucial, a partir de un dato: Cancún tiene la mitad de los votos estatales y ocho de los 15 distritos locales, y por sí mismo marcaría el destino del próximo Congreso.

 

Vaya disyuntiva para Manlio Fabio Beltrones.

 

Y 2.- mañana se dará un paso más para enriquecer la Ley Federal de Zonas Económicas Especiales.

 

El Senado realizará un foro en Tapachula bajo la coordinación de los senadores José Francisco Yunes y Luis Armando Melgar, presidentes de las comisiones de Hacienda y Especial de Productividad.