BOGOTÁ. La cifra de muertos por un alud de lodo y piedras en el noroeste colombiano se elevó el viernes a 88, informaron las autoridades.

 

El director de la estatal Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Carlos Iván Márquez, explicó telefónicamente a The Associated Press que de las 88 víctimas fatales, 56 ya fueron identificadas.

 

La avalancha se produjo por una crecida de la quebrada La Liboriana en el amanecer del lunes en la población de Salgar, en el departamento de Antioquia y a 265 kilómetros al noroeste de Bogotá.

 

El jueves hubo en el municipio un sepelio colectivo de 33 de los muertos.

 

Según Márquez, por ahora hay 322 familias damnificadas por la tragedia, es decir, unas mil 200 personas.

 

El funcionario dio como un hecho que en los próximos días habrá más sepelios colectivos en Salgar.

 

No está claro aún cuántas personas permanecen desaparecidas, pero las autoridades han dicho que las posibilidades de hallarlas con vida son mínimas.

 

La de Salgar es tal vez la mayor tragedia en Colombia desde el terremoto que en 1999 sacudió a la ciudad de Armenia y dejó más de mil muertos.

 

El presidente Juan Manuel Santos ha prometido reconstruir las viviendas perdidas y proporcionar refugio y asistencia a los afectados.

 

La accidentada orografía de Colombia, en una zona con actividad sísmica en el extremo norte de los Andes, combinada con las precarias construcciones hace del país uno de los más propensos a los desastres en Latinoamérica.

 

Más de 150 catástrofes lo han sacudido en los últimos 40 años, las cuales han cobrado más de 32 mil vidas y afectado a más de 12 millones de personas, según el Banco Interamericano de Desarrollo.

 

GH