Esta semana, tuve el privilegio de iniciar mi participación como profesor del Master de Negocios en Internet del Instituto Superior para el Desarrollo de Internet (ISDI), institución académica que inició sus actividades en España en el 2009, bajo la consigna de convertirse en la primera escuela nativa de negocios en Internet, y en la que viví una maravillosa experiencia.

 

Las inquietudes del alumnado con quien tuve el privilegio de compartir varias horas, son de altas miras: personas muy diversas, de múltiples nacionalidades con estudios profesionales y roles muy relevantes en múltiples industrias como gobierno, creatividad, publicidad, consumo, inmobiliarias, entre otras, hasta presentes o futuros emprendedores, todos ávidos de captar la mayor cantidad de información posible para capitalizar las oportunidades de negocio que ofrece la (no tan) nueva economía.

 

El denominador común que pude percibir es que prácticamente todos, tienen espíritu de emprendedor, o “startup”. Si bien es cierto que solo una parte de ellos tiene en su mente continuar o iniciar su propio negocio en internet, creo que absolutamente todos, desde su respectiva trinchera están dispuestos a mover sus responsabilidades con la agilidad, energía, e innovación que la realidad digital ofrece.

 

Una experiencia realmente llena de energía, donde lo mismo pudimos discutir (en mi caso) desde los errores más comunes para ejecutar una estrategia digital de contenido, los mitos y realidades de los community managers, la estrategia que debe haber detrás de una iniciativa de contenido, ya sea editorial o comercial, el papel de las redes sociales en una era de sobredosis de información, el valor del tiempo real para el consumidor de información digital,  hasta el futuro de la industria de los contenidos en internet, en la que revisamos tendencias móviles, modelos de pago, suscripción, retos y alternativas para hacer de los negocios digitales una opción para quienes nos dedicamos a la generación de contenidos online en múltiples formatos. No puedo olvidar que la interacción fue igualmente de altísimo nivel, con cuestionamientos puntuales, con ejemplos de negocio, con la búsqueda de respuestas al retorno de una inversión en internet, el comercio electrónico y su viabilidad, entre otros temas.

 

Mi más sincera gratitud a mi amigo Miguel Alegre quien me invitó a participar de tan maravillosa experiencia, y mi admiración y respeto a una nueva “especie” en el mapa laboral en México que pudieran ser punta de lanza para detonar un desarrollo de profesionistas más orientados hacia el futuro y menos hacia los moldes tradicionales que impiden que México avance a la velocidad de internet. Y por supuesto, mi felicitación y deseo de éxito al ISDI, que con el “Master on Internet Business (MIB), se sitúa, sitúa a nuestro país, y a nuestros profesionales a la vanguardia.