El padre Alejandro Solalinde asegura que obedecerá sin reclamo y con dolor la petición del obispo de Tehuanepec de dejar la dirección del albergue Hermanos del Camino, que atiende a migrantes en Tuxtepec, Oaxaca.

 

“Yo pienso obedecerle a él en eso y lo más seguro es que yo tenga que salir de la diócesis, tenga que entregar todo esto y a lo mejor ir a otro lado (…) yo puedo luchar contra narcotraficantes, puedo luchar contra los cárteles, puedo luchar contra los servidores públicos corruptos, contra todos puedo luchar, pero no puedo luchar contra mi propia iglesia”.

 

Sin embargo, “me costará mucho trabajo aceptar imposiciones en mi conciencia porque finalmente yo no quiero entrar a esa estructura administrativa que no ha respondido a la gente, a los pobres sobre todo”.

 

En entrevista en Atando Cabos de Radio Fórmula, Solalinde aseguró que la decisión de monseñor Óscar Armando Campos Contreras le dolió tanto que incuso su cuerpo lo resintió, pero reiteró que atenderá la solicitud y su entrega será transparente e incluso ante notario.

 

Adelantó que su servicio con el Episcopado Mexicano termina en noviembre próximo y solicitará dos meses de descanso, para analizar lo que hará.

 

El albergue, precisó, lo tendría que entregar en febrero.

 

Alejandro Solalinde dijo que la Iglesia está en crisis y que a su parecer de nada sirvió que haya hablado El Vaticano y que se haya realizado la Quinta Conferencia Episcopal Latinoamericana “si no se aplica nada de eso”.

 

Durante la Conferencia Episcopal, celebrada en el 2007, se estableció el inicio de una misión continental “y eso es lo que yo quiero hacer, obedeciendo a Cristo y al Magisterio, pero mi obispo, que sé que tiene la autoridad, no piensa así”.