WASHINGTON. Efraín Campo y Francisco Flores, los dos sobrinos de la poderosa Cilia Flores, la esposa del presidente venezolano Nicolás Maduro, confesaron ante las autoridades de Estados Unidos haber intentado introducir 800 kilos de cocaína a ese país. Ambos fueron arrestados en noviembre del año pasado en Haití en una operación secreta coordinada por la agencia antidrogas estadunidense, la DEA.