Dos menores de edad, pertenecientes a un bachilleres de Puerto Peñasco, Sonora, planearon el asesinato de uno de sus compañeros con quien mantenían problemas en la escuela, lo secuestraron y enterraron vivo pero el afectado logró salvarse gracias a su celular.

 

El joven de 16 años fue interceptado, junto a su acompañante, mientras manejaba hacia la salida a Sonoyta, a la altura del kilómetro 65; dos jovenes se les acercaron, los obligaron a subirse a otro automovil para trasladarlos al sitio donde lo golpearon, apuñalaron y después lo enterraron.

 

Identificado como César N, logró realizar una llamada a sus familiares gracias a que parte de su cabeza se mantenía sin enterrar.

 

Los hechos ocurrieron el jueves 16 de junio en el municipio sonorense, cuando al seguir el GPS del celular, los familiares de la víctima pidieron auxilio a las autoridades pues el joven se encontraba muy golpeado y semienterrado en un terreno desértico.

 

Por el hecho, Juan de Dios y Luis Enrique, de 15 y 16 años de edad, fueron detenidos acusados del crimen. Además, confesaron que tenían planeado todo por mantener riñas con su víctima, ambos quedaron a disposición del Agente del Ministerio Público.

 

En tanto, César permanece en una clínica privada y se reporta como delicado pero estable su estado de salud. Con información de Milenio TV